TEGUCIGALPA, HONDURAS
La defensora de la vida Alba Mejía criticó el intento del gobierno hondureño de privatizar el sistema carcelario hondureño y alertó que hay jugosos negocios con el mecanismo de traspasar a manos privadas el cuidado de los reos.
Al respecto, explicó que “la obligación del Estado es resguardar a los privados de libertad y se deben satisfacer los servicios que requiere la población penitenciaria”.
“Sería catastrófico para la población penitenciaria y a sus familiares en caso que se privaticen las cárceles porque el Estado se encuentra comprometido en la promoción de sus derechos humanos”, comentó.
Explicó que “puede haber un gran negocio y no nos extrañaría que se dé algún tipo de ventaja en la privatización y las organizaciones de DDHH nos opondríamos a que se privaticen las cárceles porque el Estado no puede eludir esa responsabilidad”.