
LONDRES, INGLATERRA
(Spútnik) La corte de Magistrados de Westminster mantuvo el 24 de febrero de 2020 como la fecha prevista para el inicio del juicio de extradición de Julian Assange a EEUU.
La jueza Vanessa Baraitser negó así la petición de la defensa de Assange, que intentaba demorar por tres meses la apertura de la vista pública.
Assange protestó, en voz baja y entrecortada, por las condiciones de su reclusión en la cárcel de alta seguridad de Belmarsh, en el sureste de Londres.
«Es muy difícil preparar [el caso] donde estoy … es una desventaja injusta», dijo.
A la pregunta de la jueza de si había comprendido los argumentos y decisiones de la audiencia celebrada este 21 de octubre, respondió: «Realmente no».
«No puedo pensar adecuadamente», protestó antes de abandonar la sala custodiado por dos funcionarios.
El exeditor de Wikileaks seguirá las dos próximas vistas preliminares —el 14 de noviembre y el 19 de diciembre— por conexión audiovisual desde la prisión, según dictó Baraitser.
La juez se reafirmó en su posición negativa a conceder la libertad condicional a la espera del juicio por riesgo a que Assange «vuelva a fugarse» de la Justicia británica.