El Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) en Honduras subió un 0,9 % en enero de este año, crecimiento impulsado principalmente por hoteles y restaurantes, informó este viernes el Banco Central (BCH).
El desempeño del IMAE, un indicador que mide los principales sectores de la actividad económica de un país y es utilizado para la toma de decisiones de inversión, estuvo influenciado por sectores de intermediación financiera, telecomunicaciones, hoteles y restaurantes, entre otras, indicó el BCH.
Las actividades con mayor crecimiento fueron hoteles y restaurantes (18,1 %), intermediación financiera y servicios conexos (15,1 %), construcción privada (3,1), correo y telecomunicaciones (2,8 %), transporte y comunicaciones (2,1 %), y comercio (2 %) , detalló.
Por otra parte, se registró una contracción en la actividad de industria manufacturera (-13,6 %), debido a una menor demanda internacional de prendas de vestir y arneses para vehículos principalmente desde Estados Unidos.
La entidad monetaria señaló que la fabricación de productos de metal y de hierro registró una baja en el volumen producido asociado a una reducción en el ritmo de los pedidos y al mantenimiento de plantas de producción.
A ello se suma la disminución en la fabricación de productos farmacéuticos y de jabones por la baja demanda interna y externa, ya que su producción era impulsada por la crisis sanitaria de la pandemia de coronavirus, añadió.
La industria de alimentos, bebidas y tabaco registró una variación negativa atribuida al comportamiento de la producción de azúcar, que reportó menores rendimientos en enero pasado.
No obstante, la producción de aceites y grasas, productos procesados de la pesca, carnes de aves y embutidos aumentó gracias a la demanda interna, especialmente de restaurantes y hogares, precisó el Banco Central.La economía de Honduras creció un 4,2 % en 2022, demostrando una «resiliencia económica» del país frente a un contexto internacional adverso, según el Banco Central.
El país centroamericano proyecta un crecimiento de entre un 3,5 % y un 4,5 % del producto interno bruto (PIB) en 2023, y una inflación de 5,63 %, según el Programa Monetario.