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domingo, noviembre 24, 2024
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Sherill Hernández investigó a la MS y a alias “El Porky”

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TEGUCIGALPA, HONDURAS.

Sherill Yubissa Hernández Mancía, formó parte de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) desde sus 25 años (2015), siendo asignada a la ciudad de San Pedro Sula.

La funcionaria fue encontrada muerta el 11 de junio de 2018 en su apartamento de Santa Rosa de Copán, presuntamente por suicidio, sin embargo, un informe de la Secretaría de Seguridad, en poder del medio Infobae, revela que la agente fue mandada a asesinar por los narcotraficantes y exdiputados Juan Antonio «Tony» Hernández y Alexander «Chande» Ardón.

La agente participó, entre otras, en la Operación Avalancha desarrollada por el Ministerio Público en 2016 dirigida contra la Mara Salvatrucha (MS-13), misma que derivó en la desarticulación de redes de lavado de dinero de esta estructura criminal.

Asimismo, se logró incautar casi 2,000 bienes, entre ellos, terrenos, residencias, negocios y vehículos, con un valor acumulado cercano a los 50 millones de lempiras.

Dicha operación, donde participó Hernández Mancía, condujo a la captura y posterior caso judicial de uno de los jefes de la MS-13, Alexander Mendoza, alias «El Porky»; este es vinculado al asesinato de Magdaleno Meza dentro de la cárcel de Ilama, Santa Bárbara el 26 de octubre de 2019.

Meza presuntamente era socio del exdiputado «Tony» Hernández (condenado a cadena perpetua en EE.UU.) y su hermano el expresidente, Juan Orlando Hernández (a la espera de un juicio en EE. UU.); estos tres hondureños fueron señalados por crímenes relacionados al narcotráfico.

“El Porky”

También conocido como Yulan Adonay Archaga Carías, cumplía una condena de 20 años de prisión tras ser capturado por lavados de activos y asociación ilícita cuando el 13 de febrero de 2020 fue liberado por un comando paramilitar.

La fuga sucedió en los juzgados de El Progreso, Yoro, cuando uno 80 mareros que usaron cerca de 25 vehículos y armas de fuego sacaron al cabecilla del recinto de forma violenta dejando como saldo cuatro policías muertos y un herido.

«El Porky» se encuentra en la lista de los diez más buscados por el Buró Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI, por sus siglas en inglés), órgano que se mantiene tras su pista desde 2022.

Por él se ofrecen 100,000 dólares a quien brinde información que ayude a dar con su paradero, el cual, es desconocido desde 2020.

Muerte de Sherill Hernández

El 10 de junio de 2018, Sherill Hernández Mancía, agente de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) y jefa del departamento de investigación de los delitos en contra de la administración pública de la regional de occidente fue encontrada muerta en su apartamento.

Tenía un disparo en su cabeza y el caso fue manejado con extremo cuidado y hermetismo por parte de las autoridades. 

Inicialmente el deceso de la agente de la ATIC, graduada de Administración Aduanera, fue declarado como un suicidio por el fiscal general del Ministerio Público, Óscar Chinchilla, y el director de la ATIC, Ricardo Castro.

No obstante, en aquel entonces la directora de Medicina Forense, hoy subsecretaria de Seguridad, Julissa Villanueva, señaló que la causa de muerte fue homicidio, por sometimiento y uso de arma de fuego. También denunció irregularidades en el manejo de la escena del crimen, como si de encubrir a alguien se tratara.

Villanueva aseguró que Hernández fue sometida a asfixia y luego ejecutada y consideró que el Ministerio Público le apostó a la corrupción ocultando a los asesinos de la agente.

Estas declaraciones le costaron su cargo, del cual fue cesado el 20 de noviembre de 2019, mientras el Ministerio Público se empeñó en cerrar el caso como un suicidio.

Pero, en las últimas horas, el portal argentino, Infobae, indicó que Sherill fue víctima de un asesinato ordenado por «Tony» Hernández y «Chande» Ardón.

El motivo habría sido parar las investigaciones que la agente realizaba en 2018, mismas que involucraba a narcotraficantes cercanos de alias JOH, pues su muerte ocurrió después de secuestrar documentos de la alcaldía de El Paraíso, Copán, municipalidad de Ardón entre 2016 y 2014 que continuaba controlando a través de su hijo y otros socios.

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