La actriz, musa de Luis Buñuel y exponente de la época de oro del cine nacional, recibe un homenaje en el Palacio de Bellas Artes a punto de cumplir 92 años.
La sala principal del Palacio de Bellas Artes se oscureció y ella brilló en el palco enfocada por un reflector y por el efecto de la luz en las lentejuelas de su vestido. Empezaba la fiesta de la gran diva de México, que este lunes recibió un homenaje a su trayectoria de más de siete décadas en cine, teatro y televisión. Consagrada como musa del cineasta Luis Buñuel y exponente de la época de oro del cine mexicano, la actriz ha protagonizado una celebración en blanco y negro a pocos días de cumplir 92 años el 12 de septiembre.
Los asistentes llevaban más de dos horas esperando para entrar. Los alrededores del Palacio de Bellas Artes, en el centro de Ciudad de México, habían sido ocupados por las filas: hileras para el público general, para la prensa, para los artistas invitados. Muchos se quedaron afuera cuando se abrieron las puertas pasadas las seis de la tarde. En el interior, aguardaban los actores que compartieron con la intérprete los años dorados del cine nacional, ese mundo en blanco y negro que habitaron Ignacio López Tarso, Martha Ofelia Galindo o Luz María Aguilar en la década de los cincuenta. También habían asistido intérpretes de otras generaciones, como Aracelia Ramírez o Roberto D’Amico, que tienen en Pinal una maestra.
La trayectoria de Pinal continuó con una mención a Shark, la única película que la actriz aceptó hacer para Hollywood, y con su etapa como productora y presentadora en Televisa, el gigante mediático que cofundó. No hubo menciones, en cambio, a la faceta política de la actriz, que llegó a ser diputada durante el sexenio del priista Carlos Salinas de Gortari y senadora en la Administración de Ernesto Zedillo, también del PRI.