TEGUCIGALPA, HONDURAS.
Alejandro Kafatti, oficial de política económica en el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP), señaló que el 80% del monto de las remesas enviadas por connacionales, sus familias lo utilizan para gasto corriente, y apenas el 20 por ciento para inversión.
En tal sentido el experto recomendó crear una política de inversión para las familias hondureñas que reciben divisas desde el extranjero.
“La encuesta de remesas familiares del Banco Central de Honduras reporta que alrededor del 14% de las familias que reciben divisas tienen como única fuente de ingresos estos recursos desde el exterior”, señaló.
“Entonces es necesario también crear políticas para darle una alternativa a las familias que dependen sólo de las remesas a fin de que tengan posibilidades de invertir y generar una estabilidad económica en el largo plazo”, indicó Kafatti.
La idea, dijo, la basa debido a la incertidumbre que se vive en el ámbito internacional como consecuencia de las guerras y su reflejo de inestabilidad en la parte nacional.
“El 80% de las remesas se van en el gasto del día a día, particularmente en salud, educación y demás, pero es necesario crear mecanismos mediante las políticas públicas para incrementar el porcentaje de la inversión que les genere rentabilidad a los hondureños”.
Kafatti añadió que ante la escasez de empleo en un año de incertidumbre se esperan perspectivas negativas para 2023 en Honduras. “Hay que crear algo para que les produzca a los connacionales”, acotó.
Las remesas en Honduras representaron el 28,8% del PIB, pero con las visualizaciones de crecimiento para finales de año se estima que la nación centroamericana reciba unos 9,300 millones de dólares.
