El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, anunció la designación del fiscal por el estado de Delaware, David Weiss, como investigador especial en un caso referente a Hunter Biden, hijo del presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
Hunter Biden se declaró culpable en junio de una serie de delitos menores por irregularidades en su declaración de renta, entre ellos el impago de impuestos. Sin embargo, los términos exactos de su declaración de culpabilidad nunca quedaron zanjados por un asunto adicional que surgió referente a un arma de fuego, por lo que hasta no resolverse, permanece en litigio y se mantiene declarado como no culpable.
Se presume que Hunter no pagó impuestos sobre más de 1,5 millones de dólares en ingresos en 2017 y 2018 a pesar de deber más de 100,000 dólares, legaron en julio los fiscales.
También está acusado en un caso separado de poseer ilegalmente un arma de fuego mientras era adicto y consumía una sustancia controlada, un delito grave. En virtud de un acuerdo con los fiscales en Delaware, ha entrado en un acuerdo previo al juicio por ese cargo, una alternativa al enjuiciamiento que permite a los acusados evitar una condena o tiempo en prisión.
Asimismo, Hunter Biden se enfrenta a una posible investigación del Congreso dirigida por el Partido Republicano sobre lo que el presidente del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, James Comer, describe como los “negocios turbios” de la familia Biden.
El presidente de la Cámara de Representantes, el también republicano Kevin McCarthy, ha llegado a sugerir esta semana que podría respaldar una posible investigación contra el propio presidente que podría adquirir la categoría de ‘impeachment’ o juicio político.
Cabe destacar que el fiscal David Weiss, quien ya está examinando el caso contra Hunter Biden en calidad de abogado del estado, fue nominado en 2017 por el entonces presidente, Donald Trump, y ratificado por el Senado republicano un año después. Con la nominación de Weiss, Biden quiere despejar todas las dudas sobre cualquier acusación de partidismo en favor de su hijo.
Los fiscales federales, cabe recordar, se han pasado cinco años investigando a Hunter Biden por posibles delitos graves de evasión de impuestos, lavado de dinero y otros posibles delitos.
Hunter Biden ha trabajado como miembro de grupos de presión, abogado, consultor, banquero de inversiones y artista. Igualmente, ha hablado públicamente de su lucha contra las adicciones, incluido el alcoholismo y el consumo de crack.
Trump, que fue acusado en Nueva York de presunta falsificación de registros empresariales para encubrir pagos de dinero por silencio a una estrella porno y enfrenta cargos penales federales en Florida por su manejo de documentos clasificados al dejar el cargo en 2021, ha criticado el acuerdo de Hunter Biden con los fiscales como una “multa de tráfico”.
Los cargos fiscales podrían conllevar una sentencia de hasta 18 meses, pero los expertos legales dicen que es poco probable que Hunter Biden enfrente penas de prisión porque no tiene antecedentes penales y ha aceptado la responsabilidad de sus acciones.
Con información de Europa Press