La exdirectora del Servicio de Administración de Rentas (SAR) Miriam Guzmán dijo que las exoneraciones son un beneficio fiscal que no hay que satanizar y lo utilizan la mayoría de los países con la finalidad de atraer inversiones.
Precisó que las exoneraciones pierden su objetivo y se vuelven perversas es cuando se hace un mal uso de ellas.
Explicó que son un beneficio fiscal y son otorgados para la generación de empleo y atracción de divisas.
Indicó que la dirección de política tributaria es el ente que toma ese tipo de recomendaciones pues depende de la Secretaría de Finanzas, porque a la administración tributaria únicamente le compete la recolección y administración de los tributos que se pagan.
Añadió que se dejó un estudio bastante completo y se emitieron recomendaciones que deberían de adoptarse para ser un uso más eficiente y racional de las exoneraciones que hoy por hoy el Estado de Honduras ha brindado.