TEGUCIGALPA, HONDURAS.
La designada presidencial, Doris Gutiérrez, cuestionó y mostró su desacuerdo con los incrementos de salarios de algunos altos funcionarios públicos, dicha acción la calificó como una “bofetada” para pueblo hondureño.
Gutiérrez recordó que la presidenta Xiomara Castro de Zelaya, al tomar posesión dijo “que ninguna persona debía de ganar más de lo que ella gana”.
Bajo esa indicación, Gutiérrez manifestó que “nosotros lo hemos respetado, sin embargo, vemos aumentos exagerados, sobre todo en instituciones descentralizadas y desconcentradas”.
Añadió que esos aumentos “se ven como una bofetada para el pueblo hondureño cuyo salario mínimo está entre 12 mil y 14 mil lempiras, y no digamos la gran cantidad de personas sin empleo”.
Por lo anterior, expresó que “eso debe ser un llamado a la conciencia porque es un muy mal mensaje que se está mandando al pueblo hondureño con sueldos que rayan lo estratosférico”.
Por otra parte, Gutiérrez se refirió a los más de 40 días sin sesiones en Congreso Nacional, dijo que se paraliza la agenda legislativa con temas de interés general, por lo que pidió a los diputados poner fin a la crisis en ese poder del Estado.
En relación a una posible convocatoria de parte de la oposición para sesión extraordinaria, indicó que lo ideal sería llegar a acuerdos con el oficialismo, porque ya no se está para más confrontación y polarización.