La baja ejecución presupuestaria de este año se debe a la reestructuración del nuevo gobierno y la reformulación del Presupuesto en abril sostiene la ministra de Finanzas, Rixi Moncada.
“Claro que hay una baja ejecución en los primeros nueve meses y se debe primero a la necesidad que hubo de reestructurar todo el modelo de montado para sacar los recursos públicos sin control”, afirmó.
“Lo segundo es todo lo relativo a los fideicomisos, y lo tercero, es todo ese proceso de fijar transparentemente la ruta, mecanismos y las áreas donde se va a invertir”, explicó Moncada.
En estos nueve meses “hay fondos ya comprometidos que solo van a ser pagados o cantidad de procesos de licitación, porque la transparencia tiene un costo” y en este caso es de tiempo que se necesita para publicar y participación masiva de oferentes de bienes y servicios.
“Ya no es llamada telefónica, es participación en igualdad de condiciones, entonces, la transparencia tiene un costo y se paga, pero la aspiración es ir más rápido. Esperamos que a partir de enero el grado de ejecución será mucho mayor”, prometió la ministra de Finanzas.
Moncada reconoció que la eliminación de más de 17 mil millones de lempiras que venía manejando el gobierno anterior mediante fideicomisos en la banca comercial, también han reducido la ejecución.
De acuerdo a datos del portal de la Sefin, hasta hoy la ejecución acumulada en materia de ingresos es de 59 por ciento; 14.5 por ciento en proyectos de inversión en infraestructura; y casi 53 por ciento en ejecución de gastos.
Según expertos estos datos muestran una pobre ejecución a poco más de tres meses para que termine el actual ejercicio fiscal, sin embargo, Finanzas proyecta ejecutar lo que haga falta antes que termine el año.
