Millones de personas dieron la bienvenida en todo el mundo al 2024, con celebraciones distintas según las tradiciones o la situación política y social de los países, algunos próximos a zonas de conflicto o inmersos a ellos, pero con fuegos artificiales, música y brindis, en la mayoría, por un futuro mejor.
También hubo incidentes de mayor o menor grado en algunas ciudades de Europa, como Berlín o París, donde se habían desplegado fuertes medidas de seguridad para evitar altercados como en años anteriores, a pesar de lo cual los festejos se saldaron con detenciones y policías heridos.
Las primeras en despedir el 2023 y entrar en el nuevo año fueron las regiones del sudeste asiático y Oceanía, donde los espectáculos de pirotecnia y las visitas a los templos fueron los principales protagonistas.
La neozelandesa Auckland fue la primera gran urbe en llegar al 2024 con miles de personas reunidas en torno a la torre Sky, mientras que hasta ocho toneladas de fuegos artificiales iluminaron el cielo de la ciudad australiana de Sídney, autodenominada «capital mundial del Año Nuevo».
Horas antes, los más de 7.300 habitantes del pequeño atolón de Kiritimati, en la nación de Kiribati del Pacífico sur, fueron las primeras personas del mundo en entrar en 2024.
En el sudeste asiático, Bangkok celebró el inicio del año también con fuegos artificiales y en Kuala Lumpur los festejos se centraron en el espectáculo de luces sobre las emblemáticas Torres Petronas.
En Yakarta los indonesios se reunieron entorno a la avenida General Sudirman, la principal zona comercial de la urbe.
Incidentes en Europa, y más seguridad en las principales capitales
En las principales capitales europeas se replicaron los incidentes del año pasado, aunque en menor escala gracias a una refuerzo de la seguridad, lo que no impidió que, por ejemplo en Berlín, unas 300 personas fueran detenidas, la mayoría por violaciones de la Ley de Explosivos, y 15 policías resultaran heridos.
En Francia las detenciones sumaron al menos 380 personas, de acuerdo las informaciones del Ministerio del Interior, cifras que, en todo caso, son un 10% inferiores a las del 2023.
En el conjunto del país resultaron incendiados 745 vehículos y heridos 40 policías y gendarmes, aunque de carácter leve, según los datos de Interior,
En Bruselas también hubo arrestos, 122, y al menos 60 en Amberes, principalmente por el lanzamiento de petardos y otros dispositivos que causaron daños de distinta consideración, según indicó la Policía belga.
En Madrid, donde se concentró la mayor parte de la gente en la Puerta del Sol -15.000 personas – no hubo incidentes destacables.
Austeridad y estricta seguridad en el Sur de Asia
Los países del Sur de Asia dieron la bienvenida al 2024 entre estrictas medidas de seguridad, que disminuyeron la magia de los festejos en las principales ciudades de la India o Bangladesh, e impidieron por completo las celebraciones en Pakistán.
Las autoridades de la India desplegaron miles de efectivos en localidades como Nueva Delhi, Bombay o Goa, tradicionalmente atestadas en estas fechas para celebrar la Nochevieja.
Las celebraciones fueron más austeras en el vecino Bangladesh, donde la tensión por las elecciones generales del próximo domingo, y el temor a cualquier intento de sabotaje llevó al Gobierno a ordenar el cierre temprano de los bares y a urgir a los ciudadanos a celebrar la Nochevieja en sus casas.
El Gobierno de Pakistán prohibió los festejos en solidaridad con el conflicto en Gaza y las víctimas de Palestina, lo que no impidió que muchas celebraciones se desarrollasen en el ámbito privado y se registrasen varios incidentes de disparos al aire.
El vecino Gobierno interino de los talibanes en Afganistán también prohíbe desde su llegada al poder las celebraciones de Nochevieja o Año Nuevo en el país, y las fuerzas de seguridad visitan con asiduidad centros comerciales y mercados para comprobar que no existen reuniones clandestinas.
Rusia sin celebraciones y China primer gran festejo tras la pandemia
Rusia, inmersa en la guerra en Ucrania, recibió la llegada de 2024 sin celebraciones oficiales y los tradicionales fuegos artificiales organizados por las autoridades para el Año Nuevo.
Una veintena de regiones del país cancelaron todas la actividades festivas con cargo a sus presupuestos para destinar los recursos ahorrados a la campaña militar en Ucrania y a la compra de regalos para los niños
Por su arte China celebró el fin de año con los primeros festejos sin restricciones tras dejar atrás la pandemia y la política de ‘cero covid’.
En la capital china, se registraron aglomeraciones en algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad, como la plaza de Tiananmen.
En Shanghái (este), unas 25.000 personas asistieron a la feria del templo Longhua, donde pudieron presenciar un espectáculo de luces antes del fin de 2023.
Con información de EFE
