FRANCISCO MORAZÁN, HONDURAS.
“Engañados”, se sienten los pacientes renales ante la promesa que realizó la titular de la Secretaria de Salud, Carla Paredes, de solventar la problemática que enfrentan las personas con insuficiencia renal.
Ya que, el día que los pacientes renales hicieron la protesta en la carretera CA-5 a la altura de El Durazno, para exigir que se respete su vida y el lugar dónde se quieren hacer las hemodiálisis, les dijo que dejaran la manifestación y tuvieran una reunión para llegar a un acuerdo.
Sin embargo, la titular de Salud, en la reunión que mantuvo con los representantes de los pacientes renales, mostró indiferencia a la problemática que enfrenta, por lo cual, no se pudo llegar a ningún acuerdo, situación que pone en peligro “cinco mil vidas”.
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Al respecto, Fernando Corea, representante de la Asociación Nacional de Pacientes Renales del Hospital Escuela, expresó les preocupa la indiferencia de las autoridades sanitarias, ya que se les está poniendo en peligro porque los tratamientos siguen en el “aire” y no les están dando respuesta a la problemática que enfrentan.
Asimismo, señaló que las reuniones con autoridades de la Secretaría de Salud no han sido productivas.
