El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, conversó con Nicolás Maduro, a quien le subrayó la «importancia» de contar con una «amplia observación internacional» en las elecciones que se celebrarán en ese país el 28 de julio.
La Presidencia brasileña informó sobre esa conversación en una nota oficial, en la que Lula reiteró el apoyo brasileño a los acuerdos de Barbados y destacó la importancia de contar con una amplia presencia de observadores internacionales.
Lula también «manifestó su expectativa de que las sanciones en vigor contra Venezuela puedan ser levantadas, de modo de contribuir para que el proceso electoral pueda seguir adelante en un clima de confianza y entendimiento».
Aunque Lula enfatizó la necesidad de una amplia participación de observadores internacionales en los comicios de julio, el Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil anunció esta semana que no enviará ninguna misión a Venezuela.
El organismo electoral no explicó las razones de la decisión ni aclaró si participará en una posible misión del foro BRICS, fundado por Brasil, Rusia, India, China y Suráfrica, que al igual que el TSE fue invitado por Venezuela.
La semana pasada, Colombia también anunció que no enviará ninguna misión, pues según explicó el canciller, Luis Gilberto Murillo, no habría «tiempo» para «estructurarla» con las características técnicas exigidas por las autoridades venezolanas.
Asimismo, la semana pasada el Consejo Nacional Electoral venezolano retiró la invitación que había hecho a la Unión Europea (UE) para que enviara observadores, después de que el bloque ratificó las sanciones a miembros del Gobierno y el partido oficialista.