El presidente salvadoreño, Nayib Bukele, aseguró este martes que en 10 años El Salvador «tendrá seguridad alimentaria», en momentos en que su Gobierno implementa un plan para bajar los precios de los productos de la canasta básica, para «sanar» la economía, y que anunciará que propondrá suspender por una década «todos» los aranceles a algunos alimentos.
«Creemos que en 10 años El Salvador va a poder tener su seguridad alimentaria, entonces el Gobierno de ese entonces decidirá si quiere renovar por el período de cero aranceles que ellos crean conveniente», dijo el mandatario durante la inauguración de un centro tecnológico de datos en la localidad de Ciudad Arce, a 38 kilómetros de la capital.
Bukele indicó que lo anterior es parte de un plan económico, del que no se había hecho referente antes, que tiene entre sus componentes la alimentación, la sostenibilidad y la tecnología.
Dicho plan también contempla la construcción de «varias centrales de abasto» de diferentes productos que, de acuerdo con Bukele, serán administradas por empresa privadas, con «bajos precios de manera sostenida» y que no «sustituirán» a los diferentes mercados municipales.
«Una vez construidas las centrales de abasto ser van a ir cerrando paulatinamente los agromercados», aseguró.
El mandatario salvadoreño llamó hace unas semanas a comerciantes, importadores y mayoristas a bajar los precios de los alimentos para «sanar» la economía y luego anunció la implementación de «agromercados» en diferentes zonas del país, organizados por el Ministerio de Ganadería y Agricultura.
Según las cifras oficiales, cuando Bukele llegó al poder en 2019 el promedio de la canasta básica alimentaria era de 200,02 dólares y en 2024 marca los 256,02 dólares en el área urbana, mientras que en la zona rural pasó de 144,48 a 182,62 dólares entre 2019 y 2024.
Entre los elementos que constituyen la canasta básica alimentaria se encuentra el pan, tortillas, fríjoles, carnes, huevos y frutas, entre otros, para una familia de unos 4 miembros.
El salario mínimo en El Salvador en el área comercio y servicios es de 365 dólares y en el rubro maquila es de 354,36 dólares.
Mientras, los trabajadores de la agricultura reciben un sueldo entre 243,45 y 272,66 dólares.
La mayoría de productos de la canasta básica llega a El Salvador de países vecinos como Guatemala, Honduras y Nicaragua para cubrir la demanda local.
Esta dependencia es del 90 % para hortalizas y verduras, 60 % para derivados de la leche, 32 % en el caso del maíz, 25 % para el fríjol y un 33 % en el caso del arroz.
Bukele asumió el pasado 1 de junio un segundo mandato consecutivo, pese a que lo prohíbe la Constitución, y prometió «sanar» la economía tras curar al país del «cáncer» de la violencia, generada principalmente por los grupos de pandillas.
De acuerdo con una reciente encuesta del Instituto Universitario de Opinión Pública de la jesuita Universidad Centroamericana (Iudop), un 73,7 % de la población opina que el principal problema del país está relacionado con factores económicos, mientras que el 25,8 % manifestó que el principal fracaso del primer período del Gobierno de Bukele se dio en materia económica.
Con información de EFE