El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, denunció este domingo que en los últimos siete días, Rusia utilizó en el marco de su guerra de agresión contra Ucrania unos 1.280 sistemas de ataque aéreo, entre drones, misiles y bombas guiadas.
“Sólo esta semana, Rusia usó cerca de 630 bombas guiadas, unos 550 drones y más de 100 misiles de varios tipos contra Ucrania”, dijo Zelenski en un mensaje acompañado de un video publicado en su canal de Telegram.
El ejército ruso bloquea a más de 200 soldados ucranianos en Kurájove (Donetsk)
Por otro lado, el Ejército ruso ha bloqueado a más de 200 soldados ucranianos en Kurájove, estratégico bastión de la región de Donetsk que está a punto de caer en manos de Moscú, según informaron las fuerzas de seguridad rusa a medios locales.
“En Kurájove 200 soldados ucranianos, como mínimo, están bloqueados. Eso sólo en la Central Termoeléctrica”, señaló la fuente a la agencia TASS.
Destacó que en los límites de la ciudad, que tenía unos 20.000 habitantes antes de la guerra, aún existen otros “focos” de resistencia.
Asedio ruso a Kurájove
Las tropas rusas están intentando destruir a todos los defensores de Kurájove sin darles oportunidad de abandonar la urbe, que está prácticamente rodeada, añadió.
El líder de la república popular de Donetsk, Denís Pushilin, también destacó a RIA Nóvosti que en los últimos días ha aumentado “el ritmo de la liberación” de la ciudad y aseguró que los combates transcurren “calle por calle”.
Además, cerca de 700 soldados ucranianos también habrían sido bloqueados al sur de Kurájove, en la localidad de Hannivka, según Vladímir Rógov, conocido activista separatista en el Donbás.
“De hecho, en el cerco cayeron varias compañías y destacamentos de las fuerzas especiales del Ejército ucraniano. Hasta ocho veces solicitaron permiso para retirarse, pero se les denegó (…) los soldados no tienen mucha elección: o se entregan o serán aniquilados”, señaló a TASS.
Toma de la práctica totalidad del sur del Donbás
Las tropas rusas ya izaron el sábado la bandera tricolor en el edificio del Ayuntamiento de la ciudad, cuya conquista significará la toma de la práctica totalidad del sur del Donbás.
Lo mismo ocurrió hoy en el centro de Uspenivka, al sur de Kurájove, donde los rusos están limpiando la localidad de enemigos.
La prensa ucraniana reconoce que la situación en Kurájove es crítica, ya que, además de la manifiesta superioridad enemiga en hombres y armamento, las unidades ucranianas no pueden recibir refuerzos.
De esta forma, los rusos tienen el camino expedito hacia Velika Novosilka, próximo objetivo en su lista, y la frontera con la vecina región de Zaporiyia.
A su vez, las tropas rusas ya se encuentran a escasos kilómetros de Pokrovsk, la principal plaza en la corazón de Donetsk, ya que en febrero de 2022 tenía 60.000 habitantes e importantes yacimientos de coque.
El objetivo de la inusitada aceleración de la ofensiva rusa en el Donbás, cuyo coste en bajas llegó a superar las 2.000 diarias, según fuentes británicas, es llegar en la mejor posición negociadora a la investidura del presidente de EEUU, Donald Trump, y a las futuras conversaciones entre el nuevo inquilino de la Casa Blanca y el jefe del Kremlin, Vladímir Putin.
Drones ucranianos causan explosiones en la capital chechena
Por otro lado, drones ucranianos causaron varias explosiones en Grozni, la capital de la república norcaucásica Chechenia, según informan varios canales de Telegram.
El líder chechén, Ramzán Kadírov, reconoció que un dron ucraniano golpeó una base de la Guardia Nacional en la capital de la república norcaucásica, Grozni.
Testigos oculares aseguran haber visto varios drones de ala fija sobre la ciudad, donde se escucharon al menos cinco explosiones, según el canal NIYSO.
Además, el Ejército de Ucrania informó del derribo de 56 drones lanzados por Rusia en un ataque aéreo realizado durante la noche del sábado a este domingo.
Con información de EFE