El 10 de Argentina inicia su quinto Mundial con la obsesión de todo un país por conseguir la tercera estrella.
Debuta Lionel Messi este martes en el Mundial. Y debuta, con él, Argentina. Ninguna selección entre las favoritas posee tan alto grado de dependencia de un futbolista como la albiceleste, aunque no solo su capitán ha sido el artífice de la racha de 36 partidos de invicto con que se presenta al torneo.
«Llego en un gran momento tanto físico como personal, no tengo ningún problema», adelantó Messi a punto de iniciar un trayecto corto, pero duro, de siete partidos hasta poder tocar la copa dorada” mi gran sueño”.
Y el de todos los futbolistas del planeta, sólo que él se siente más obligado por la majestuosa carrera que ha protagonizado y a la que únicamente le falta el título mayor.
Ha estado dos días poco visible ante la prensa en los entrenamientos de Argentina, en la Universidad de Qatar, junto a España, y ha sido suficiente para que brotara el desasosiego sobre su estado físico ante el inminente debut frente a Arabia Saudi (11 h.), comparsa invitado ante el estreno del ¿último? baile mundialista de Leo. «Es la última oportunidad», dijo él.
El astro apareció ante los medios junto al otro Lionel, Scaloni, y garantizó su participación, generando un imaginario suspiro de alivio entre los millones de aficionados sumados a la causa.
“Es hermoso que mucha gente que no es argentina desee que seamos campeones en parte por mí. Soy un agradecido por todo el cariño que he recibido a lo largo de mi carrera», explicó, sabiendo miles de culés forman parte de ese ejército de incondicionales.
En los pies de Messi, en su cabeza, en los hombros, carga con el peso de darle a Argentina el tercer título mundial, 36 años después del último, el de Maradona, otra presión, y dos finales perdidas (1990 y 2014), una de cada uno, ambas frente a Alemania. Lo sabe. Y no le asusta. Está acostumbrado.
Messi no ha seguido ninguna preparación especial en un torneo distinto a los anteriores. Ese gran momento que decía pasar lo ha demostrado en el inicio de temporada con el Paris Saint Germain: 12 goles y 14 asistencias en 19 partidos, según Transfermarkt. Número de sus mejores momentos con el Barça, del Messi pletórico
«Me sentí más cómodo cuantos más minutos jugaba y eso intenté hacer hasta llegar al Mundial», dijo Messi reconociendo que tal vez sea su último Mundial y en él desea conseguir «el gran sueño que tengo». Viéndose cerca del final, admite que «disfruto mucho más de todos los detalles”, reconociendo que no saboreó su privilegiada carrera.