TEGUCIGALPA, HONDURAS.
Miembros de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) y fiscales del Ministerio Público (MP) realizaron este sábado un allanamiento en la residencia del general en condición de retiro, Romeo Vásquez Velásquez, ubicada en el sector de Las Casitas, en esta capital.
De acuerdo con declaraciones de su apoderada legal, la intervención comenzó con una confusión, ya que los fiscales ingresaron inicialmente a una vivienda equivocada, la cual —según explicó— no pertenece al general, sino que es alquilada para eventos.
Posteriormente, las autoridades se trasladaron a la residencia donde efectivamente habitaba Vásquez Velásquez, a la cual accedieron de forma forzada, rompiendo el llavín de ingreso con un artefacto, sin presentar una orden judicial de allanamiento.
Una joven que se encontraba en el interior del inmueble solicitó la orden correspondiente para permitir el ingreso, pero según relató, los fiscales le manifestaron que tenían la facultad de entrar sin autorización judicial, por lo que podían proceder por la fuerza, como finalmente ocurrió.
Hasta el momento, el Ministerio Público no ha informado si el objetivo del allanamiento es la ejecución de aseguramientos o la búsqueda de pruebas relacionadas con el nuevo caso que enfrenta el exjefe militar, quien fue acusado recientemente por el delito de lavado de activos agravado.
Acusación por lavado de activos
El viernes pasado, el MP presentó ayer viernes un requerimiento fiscal contra Romeo Vásquez por presunto lavado de activos, delito cometido en perjuicio del orden socioeconómico del Estado.
Según el ente acusador, la investigación se basa en un video pericial donde se observa a Vásquez recibiendo dinero en efectivo de un conocido narcotraficante, líder de uno de los carteles más violentos del país, y condenado posteriormente en Estados Unidos.
El video fue sometido a un análisis técnico en el Laboratorio de Video Forense de la Dirección de Medicina Legal, donde peritos certificados confirmaron su autenticidad, según la Fiscalía.
Además, la acusación se sustenta en pericias financieras elaboradas por la Fiscalía Especial contra el Crimen Organizado (FESCCO), que indicarían un flujo irregular de dinero, supuestamente recibido en 2013 y guardado en una bolsa plástica.
Vásquez, prófugo desde marzo
El general retirado se encuentra prófugo desde marzo, tras ser acusado en enero junto a otros dos oficiales de alto rango por el asesinato de Isy Obed Murillo, joven que murió el 5 de julio de 2009 durante la crisis política que derivó en el derrocamiento del entonces presidente Manuel Zelaya.
Murillo fue alcanzado por una bala en la cabeza cuando una multitud se congregó en las inmediaciones del aeropuerto Toncontín para recibir al mandatario depuesto.
Por este caso, dos de los tres acusados ya guardan prisión, mientras que Vásquez permanece en paradero desconocido.
Autoridades de Seguridad del Estado han ofrecido una recompensa de 3.5 millones de lempiras por información que conduzca a su captura.
Desde la clandestinidad, Vásquez ha denunciado a través de videos difundidos en redes sociales que es víctima de una persecución política.
En su más reciente declaración, publicada el jueves, acusó al fiscal general Johel Zelaya de querer “quitarle hasta su casa ilegalmente”.
Investigación patrimonial en curso
Además del proceso penal, la Fiscalía ha iniciado una investigación patrimonial para determinar el origen de los bienes del general retirado, quien fue la máxima autoridad castrense durante la crisis política de 2009.
La actuación de las autoridades ha generado debate entre sectores jurídicos y defensores de derechos humanos, particularmente por la presunta violación al debido proceso en el allanamiento de la vivienda.