TEGUCIGALPA, HONDURAS.
EFE- El ambiente que viven los hondureños se está viendo afectado por el alto costo de los productos y servicios, lo que contrasta con los bajos salarios que devenga la mayoría de la población.
Para frenar el coste de los alimentos, el Gobierno que preside Xiomara Castro anunció el jueves el congelamiento de precios de 40 productos de la canasta básica durante 30 días.
Según la ordenanza oficial, el coste que deberá regir en los 40 productos deber ser el que se mantenía hasta el 7 de octubre, lo que rechazan empresarios y productores.
Entre los consumidores las opiniones están divididas, entre los que apoyan la iniciativa gubernamental y los que la rechazan, porque consideran que «todo está muy caro y el dinero ya no ajusta para comprar todo lo que se necesita en casa», como dijo este sábado a EFE Inés Bonilla, una maestra de educación primaria, madre soltera, con tres hijos, mientras compraba en un mercado capitalino.
«El Gobierno dice que los precios están congelados, pero todo está caro, hoy son los mismos precios de la semana pasada», agregó.
En los mercados populares los clientes y vendedores se quejan del alto coste de los productos, mientras que para los empresarios el congelamiento de precios tendrá un efecto positivo inmediato si la decisión fue tomada por razones políticas, pero los resultados serán negativos a mediano y largo plazo, dijo el viernes el presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés, Eduardo Facussé, en el norte del país.
Facussé considera que si la medida del Gobierno es por razones económicas, entonces se debe identificar la raíz de los problemas por cada sector productivo para resolverlos.
Entre los productos que más consumen los hondureños durante las fiestas de Navidad y Nochevieja son verduras, legumbres, carnes de cerdo, pollo, pavo en menor grado; huevos y pan, los dos últimos principalmente para las torrijas o torrejas, uno de los postres que en Honduras también se consume durante la Semana Santa.
En las últimas semanas el precio de casi todos los productos aumentó, lo que en opinión del secretario de Desarrollo Económico, Pedro Barquero, no se justifica.
MUCHOS DISFRUTAN DEL AMBIENTE NAVIDEÑO
Pese a los múltiples problemas que sufre Honduras, como la pobreza que afecta a más del 70 % de sus casi 10 millones de habitantes, la violencia criminal, la corrupción y deficientes sistemas de salud y educación, muchos están disfrutando del ambiente navideño que es visible en las principales ciudades, en gran medida promovido por el comercio.
En algunas plazas o parques como el Naciones Unidas, en Tegucigalpa, también conocido como El Picacho, donde las luces multicolores y nacimientos le han puesto el toque de la Navidad, son concurridos por centenares de personas, muchos en grupos familiares de todas las edades.
«El ambiente lo miro alegre, con muchos colores. Está bonito, toda la capital está muy bonita, así que vengan a disfrutar, a relajarse», dijo a EFE Rita María Macías, natural de Comayagua, región central del país, pero residente en Tegucigalpa, mientras paseaba de noche con su familia en el Parque Naciones Unidas.
Agregó que la gente debe salir «a divertirse» para dejar por un momento los problemas que tiene el país, entre los que recordó la pandemia de la covid-19.
«La Navidad yo la celebro en casa, con mis hijos, en familia, dando gracias a Dios, yendo a la iglesia y compartiendo con el que no tiene», subrayó.
Para las fiestas navideñas, Rita María indicó que decora su casa, visita amigos y familiares, o les llama por teléfono e invita «a casa a compartir el nacimiento de nuestro señor Jesucristo».
«De las comidas yo prefiero todo, me gustan las torrejas, de pinol (harina de maíz tostado), de pan. Me gusta todo lo que es de horno, el pavo, la gallina rellena. Los nacatamales, me fascinan; el ronpopo (licor con leche y huevos), las manzanas, las uvas, todo lo que se relaciona con la Navidad. A mí me fascina la Navidad», enfatizó.