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lunes, diciembre 15, 2025
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Ana Paola Hall acusa “verdades a medias” en el CNE y niega que el escrutinio especial se limite al 5.6 % de actas

La presidenta del órgano electoral responde a Marlon Ochoa y aclara que el pleno solo autorizó el inicio de un escrutinio de oficio, mientras aún están pendientes solicitudes e impugnaciones conforme a ley

TEGUCIGALPA, HONDURAS.

La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Ana Paola Hall, advirtió este domingo que dentro del propio órgano electoral se están difundiendo “verdades a medias” sobre el desarrollo del proceso de elecciones generales, lo que —a su criterio— contribuye a la desinformación, retrasa el conteo y erosiona la confianza pública en un momento clave para la democracia hondureña.

A través de su cuenta oficial en la red social X, Hall respondió directamente a las declaraciones del consejero Marlon Ochoa, quien denunció que únicamente el 5.6 % del total de actas sería sometido a escrutinio especial en el nivel presidencial.

La titular del CNE aclaró que lo aprobado por el pleno fue iniciar de oficio el escrutinio especial con 1,081 maletas electorales correspondientes al nivel electivo presidencial, pero en ningún momento se estableció que esas serían las únicas actas que pasarán por este proceso.

“Nadie dijo que serían las únicas que irían a escrutinio especial en ese nivel electivo”, subrayó Hall.

Escrutinios e impugnaciones aún en análisis

Hall precisó que el CNE ni siquiera ha comenzado a analizar las solicitudes formales de escrutinio especial presentadas por los partidos políticos, cuyo plazo de recepción vence mañana, ni las impugnaciones ya ingresadas, las cuales deben ser evaluadas conforme a lo que establece la ley electoral.

“Ni siquiera se habló aún de las solicitudes de escrutinios especiales cuyo plazo de presentación vence mañana; ni se han hecho los análisis de lo que corresponde conforme a Ley, en las impugnaciones ya presentadas”, escribió la funcionaria.

En ese sentido, insistió en que afirmar que el escrutinio se limitará al 5.6 % de las actas constituye una distorsión del proceso en curso, ya que las decisiones finales aún dependen de los recursos legales y de las etapas que deben agotarse.

Señalamientos por desinformación y ataques

La presidenta del CNE fue más allá al cuestionar las motivaciones detrás de estas declaraciones, al considerar que se trata de una estrategia que mezcla información incompleta con ataques personales.

“Sería mejor preguntarse por qué dicen verdades a medias, demoran el proceso, desinforman y atacan a dos mujeres que somos autoridades electorales, sabiendo lo que esto implica para el país”, expresó Hall.

Además, lanzó una advertencia sobre el impacto internacional de la crisis política y electoral. “¿Es que acaso no se dan cuenta que el mundo los está viendo y que la historia pondrá a cada uno en su lugar?”, cuestionó.

La postura de Marlon Ochoa

Las declaraciones de Hall surgen luego de que el consejero Marlon Ochoa publicara una denuncia pública, en la que afirmó haber propuesto en el pleno del CNE el conteo voto por voto de las 19,167 Juntas Receptoras de Votos (JRV) del nivel presidencial, ante lo que calificó como “escandalosas inconsistencias documentadas”.

Según Ochoa, la decisión mayoritaria del pleno fue realizar el escrutinio especial únicamente en 1,081 actas, equivalentes al 5.6 % del total, lo que —a su juicio— limita la verificación integral del proceso.

“Si el CNE no está dispuesto a verificarlo todo, no está en posición de pedirle al pueblo que confíe ciegamente en el resultado”, escribió el consejero.

Tensiones internas en un momento clave

El cruce de señalamientos entre los propios consejeros del CNE evidencia las tensiones internas que atraviesa el órgano electoral en medio de un proceso altamente observado a nivel nacional e internacional, cuando el país sigue a la espera de una declaratoria oficial de resultados presidenciales.

Mientras tanto, el CNE continúa con las etapas previstas en la ley, incluyendo el escrutinio especial, el análisis de impugnaciones y la resolución de recursos pendientes, en un contexto donde la confianza ciudadana y la estabilidad institucional están bajo una fuerte prueba.

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