FRANCISCO MORAZÁN, HONDURAS.
El jefe de la comisión interventora del Instituto Nacional Penitenciario, Ramiro Muñoz, en las últimas horas, justificó el uso de la fuerza dentro de las cárceles del país, ante la rebeldía de los privados de libertad, luego de denuncias de agresiones de agentes de seguridad contra reclusos en el centro penal de Támara.
Detalló “yo le ordené al director del centro penal que retirará los teléfonos, no podemos estar cometiendo ilícitos nosotros, colocándole las herramientas a un privado de libertad para que pueda cometer los ilícitos desde allí”.
Amplió que, al momento que el oficial iba a quitar los teléfonos, los privados de libertad comenzaron a golpear las puertas, los candados y las celdas.
Por tanto, enfatizó que, “el procesamiento que está establecido en un centro penal, es no tener contacto con ese privado de libertad sino hacer uso del gas lacrimógeno para evitar el contacto, pero si no se controla con el gas los agentes penitenciarios los van hacer que entren de nuevo, nadie está sobre la autoridad”.
Cabe señalar que, entre los reos que han presentado quejas por haber sido golpeados se encuentran figuras mediáticas como el extraditado Gilbert Reyes, Miguel “Chepe” Handal y Óscar “El Pescado” Bonilla.