FRANCISCO MORAZÁN, HONDURAS.
El Tribunal de Justicia Electoral (TJE), enfrenta una grave parálisis institucional debido a las reiteradas inasistencias del magistrado Mario Morazán y de los magistrados suplentes, situación que amenaza con provocar una crisis democrática a pocas semanas de las elecciones generales, expresó el magistrado presidente del órgano jurisdiccional, Mario Flores Urrutia.
Señaló que, “el pueblo hondureño debe saber que estamos cumpliendo nuestras obligaciones. No obstante, en la situación que tenemos ahora, la ausencia del magistrado Morazán y de los suplentes, quienes deben acatar la convocatoria en caso de ausencia justificada, está afectando el funcionamiento del tribunal”.
A la vez, dijo que, la recusación interpuesta en su contra es una “artimaña para paralizar la acción jurisdiccional”, ya que, no conoce el expediente ni quién la presentó, y que el trámite debe seguir lo dispuesto por el artículo 44 de la Ley Orgánica Procesal Electoral.
Asimismo, comunicó que, este martes se emitió una convocatoria a las 10:00 de la mañana para conocer asuntos jurisdiccionales electorales, y no políticos, aclarando que se enviaron invitaciones formales tanto al magistrado Morazán como a los suplentes.
Subrayó que, “yo simplemente invité públicamente al señor Mario Morazán a que se siente en el pleno y conozcamos esa recusación los tres magistrados propietarios, tal como lo establece la ley. Si hay motivaciones debidamente justificadas, me aparto; pero si no lo son, continuamos con la sesión. Lo que no puede pasar es que se detenga el trabajo del tribunal”.
Igualmente, advirtió que, la actual situación refleja el mismo patrón de bloqueo que se vivió en el Consejo Nacional Electoral (CNE), donde —según él— las diferencias internas y el comportamiento del representante del partido de gobierno provocaron parálisis.
Destacó que, “ahora se replica aquí, en el TJE. Estamos a las puertas de una crisis democrática. El pueblo hondureño debe estar atento, porque las minorías no pueden imponerse sobre las mayorías”.
Ratificó que, el caso de Jorge Cálix, así como otro expediente proveniente del departamento de Valle, ambos en manos del TJE, aún no han podido conocerse debido a la falta de quorum en el pleno.
Por lo cual, cuestionó que, “no he tenido a la vista ninguno de los expedientes. No sé por qué el magistrado Morazán ha decidido obstaculizar este proceso; parece que busca ganar tiempo y entorpecer la actividad jurisdiccional”.
Reprochó la falta de compromiso de los magistrados suplentes, indicando que ni siquiera los conoce personalmente, “fueron nominados por el Congreso Nacional (CN), tienen oficinas en el tribunal, pero no hacen acto de presencia. En ocasiones los miro en los pasillos, pero no cumplen con sus funciones. Vamos a ver si hoy hacen acto de presencia”.
Finalizó diciendo que, el tiempo es el principal enemigo del tribunal, ya que faltan solo 41 días para las elecciones primarias, y el retraso en la resolución de expedientes podría afectar directamente la transparencia y legalidad del proceso electoral, “no quiero ser pesimista ni alarmista, pero la situación es grave. Que sea el pueblo hondureño quien juzgue lo que está ocurriendo: estamos en una profunda crisis sobre la democracia del país”.