• El organismo legislativo critica severamente los ataques de la mandataria hondureña contra Estados Unidos y afirma que la candidata oficialista obtuvo apenas el 19 % de los votos. Castro, por su parte, insiste en que hubo injerencia, fraude y alianzas entre conservadores de Washington y el crimen organizado.
ESTADOS UNIDOS.
La crisis postelectoral hondureña escaló nuevamente este martes tras un pronunciamiento del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, que acusó a la presidenta Xiomara Castro de utilizar una “guerra jurídica” para presionar a las autoridades electorales y promover la anulación de los comicios del pasado 30 de noviembre.
En un mensaje publicado en redes sociales, el Comité sostuvo que la mandataria estaría intentando intimidar al Consejo Nacional Electoral (CNE) para forzar una narrativa de fraude basada en señalamientos sin sustento.
“La presidenta hondureña está usando la guerra jurídica para intimidar a los funcionarios electorales para que respalden una anulación e impulsen acusaciones al estilo Rusiagate sobre interferencia estadounidense”, señaló la publicación.
El pronunciamiento también cuestionó el peso político del oficialismo en las urnas al afirmar que la candidata socialista del partido gobernante “obtuvo apenas el 19 % de los votos”, en referencia a los resultados preliminares divulgados por el sistema TREP.
Castro responde con más denuncias de injerencia y fraude
Las críticas estadounidenses surgieron el mismo día en que la presidenta Castro reforzó su discurso sobre la ilegitimidad de las elecciones, acusando directamente al presidente estadounidense Donald Trump de intervenir en el proceso hondureño.
“Condeno la injerencia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en las elecciones generales, donde hubo trampas, fraudes y manipulación”, declaró la mandataria.
Castro insistió en que el proceso electoral estuvo marcado por amenazas, chantaje y adulteración de la voluntad popular, elementos que —según ella— justifican su rechazo a los resultados.
Señala alianzas entre conservadores de Washington y el crimen organizado
En un mensaje aún más polémico, la presidenta hondureña afirmó que sectores conservadores en Estados Unidos habrían decidido aliarse con estructuras del crimen organizado para influir en el escenario político hondureño.
“Los conservadores de Washington han tomado la decisión de aliarse con el narcotráfico, con el crimen organizado y las maras que durante doce años y siete meses operaron con impunidad desde el propio Estado”, expresó.
Esta declaración llega en un momento de fuerte tensión bilateral y en medio de advertencias de legisladores estadounidenses que piden vigilar cualquier intento del gobierno hondureño por desconocer los resultados.
Escalada diplomática y un clima político cada vez más volátil
El intercambio de acusaciones entre el gobierno hondureño y actores de alto nivel en Estados Unidos profundiza la crisis institucional que atraviesa Honduras.
Mientras Washington reprocha a Castro un intento de manipular el proceso mediante presión política y judicial, el oficialismo insiste en que existe una operación internacional para impedir la continuidad de su proyecto.
El choque discursivo abre la puerta a un deterioro en las relaciones bilaterales y añade un elemento más a la ya compleja disputa por la legitimidad de las elecciones.
