- Tras el feriado, los diputados volverán a reunirse para intentar consensuar la agenda legislativa.
TEGUCIGALPA, HONDURAS.
El Congreso Nacional anunció que no celebrará sesiones durante las próximas dos semanas y retomará su actividad hasta después de la Semana Morazánica, en un momento en que el país enfrenta tensiones políticas, sociales y económicas que demandan respuestas urgentes.
La decisión se tomó tras la reunión de jefes de bancada celebrada el martes, donde se revisó la agenda legislativa pendiente.
Sin embargo, en lugar de avanzar en consensos, los diputados optaron por postergar las discusiones, lo que ha generado críticas sobre la falta de compromiso del Legislativo.
Los temas en pausa
De acuerdo con la diputada Ligia Ramos (PSH), entre los asuntos a discutir tras el receso figuran la extensión de la legislatura hasta enero de 2026 y la aprobación del presupuesto para el Tribunal de Justicia Electoral (TJE) y la Unidad de Política Limpia, considerados indispensables para el desarrollo de los comicios de noviembre.
También se encuentran en lista proyectos en tercer debate, como la rehabilitación de carreteras en el Litoral Atlántico y Cortés, y reformas pendientes a la Ley de Inprema.
Sin embargo, Ramos subrayó que los préstamos millonarios solicitados por el Ejecutivo no cuentan con respaldo de la mayoría de bancadas.
El peso de la deuda y la Ley de Justicia Tributaria
El jefe de bancada liberal, Mario Segura, reiteró que su partido no apoyará el endeudamiento de 1,045 millones de dólares, aunque sí estaría dispuesto a dar luz verde a créditos específicos, como el de 178 millones para la carretera La Ceiba-Trujillo.
En paralelo, el oficialismo mantiene su interés en llevar a tercer debate la Ley de Justicia Tributaria, pero los números no le favorecen: la oposición insiste en que no existen los 65 votos necesarios para aprobarla.
Reacciones y críticas
Durante el encuentro, también surgió el tema de las recientes capturas en San Pedro Sula, donde Segura expresó solidaridad con el alcalde Roberto Contreras y advirtió que los procesos judiciales deben desarrollarse sin motivaciones políticas.
Críticos de la decisión del Congreso sostienen que el receso prolongado evidencia una parálisis institucional, donde las prioridades electorales se colocan por encima de las necesidades ciudadanas. Mientras tanto, proyectos claves para educación, infraestructura y transparencia siguen sin resolverse.
Congreso en pausa, país en espera
Con la suspensión de sesiones, el Congreso Nacional opta por un descanso en medio de la crisis y traslada las discusiones más sensibles para después del feriado.
La ciudadanía, sin embargo, continúa exigiendo respuestas a problemas inmediatos como la corrupción, la falta de empleo y el creciente endeudamiento público.