TEGUCIGALPA, HONDURAS.
- Sólo en siete medicamentos, la Sesal pagará L 19.5 millones más que en la compra anterior, al no mantener el precio a pesar del aumento sustancial en las cantidades.
- Muchos de los 359 medicamentos no adjudicados en el último proceso son utilizados para tratar enfermedades oncológicas, cardiovasculares, neurológicas y diabetes.
TEGUCIGALPA, HONDURAS.
En los últimos cuatro años, la Secretaría de Salud (Sesal) ha habilitado un presupuesto de 7,653 millones de lempiras para compras directas en medicamentos bajo el argumento de una emergencia sanitaria, perpetuando malas prácticas, elevando los riesgos de corrupción y poniendo en peligro la salud de millones de hondureños, denunció este jueves la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ).
Esta situación evidencia la inoperancia e incapacidad institucional para planificar y ejecutar compras públicas de forma eficiente y transparente. A pesar del tiempo y los recursos disponibles, la Sesal no logró comprar de manera eficiente, castigando así a los pacientes más vulnerables con desabastecimiento, mientras se abre la puerta a la discrecionalidad y a prácticas opacas.
El capítulo de Transparencia Internacional en Honduras recalcó que, si bien la ley estipula el mecanismo de compras directas para casos excepcionales, estas se ha vuelto la norma en la adquisición de medicamentos y otros insumos de salud, tal como lo han expresado públicamente las autoridades de la Secretaría de Salud (Sesal), anunciando compras directas para adquirir los medicamentos fracasados y desiertos.
El proceso de licitación LPN 07-2024-SESAL tomó 177 días desde la publicación de los pliegos hasta la notificación de adjudicación, un plazo excesivo para un proceso tan importante que demanda eficiencia. Además, se identificaron al menos cuatro nuevos requerimientos bajo la condición de “no subsanables” en los formularios, lo que derivó en el descarte de múltiples ofertas y en la adjudicación de sólo 70 medicamentos de los 429 requeridos. Es decir, 359 medicamentos (84 %) no fueron adjudicados, dejando en riesgo el abastecimiento para el resto del año.
Estos medicamentos son esenciales para tratar enfermedades como: cáncer, diabetes, afecciones cardiovasculares, neurológicas, entre otras. En consecuencia, la falta de acceso a los fármacos impactará gravemente a una población altamente vulnerable.
De acuerdo con una veeduría social realizada por ASJ, el 42 % de los pacientes consultados no cuenta con ingresos mensuales, mientras que solo un 20 % tiene ingresos iguales o menores a L 6,000. Además, el 31 % padece enfermedades crónicas que requieren tratamientos constantes y oportunos.
Opacidad y deficiencias en planificación
Por otro lado, se observa un preocupante aumento en los precios de algunos medicamentos. En una muestra de siete productos, pese a que la cantidad a adquirir aumentó en más del 150 %, la Sesal pagará L 19.5 millones más en comparación con los precios de la última compra LPN 08-2023 sin justificación clara del alza.
En términos presupuestarios, también se identifican serias deficiencias en la planificación. Aunque el Congreso Nacional aprobó un presupuesto de L 2,284,790,205 para la compra de medicamentos en 2025, al cierre de abril ya se había reducido en L 551.2 millones, sin que se informe hacia dónde fueron trasladados dichos fondos. A la fecha, se han ejecutado L 347 millones y se proyecta que Salud destine L 1,090.3 millones a la compra de los 70 medicamentos adjudicados en la LPN 07-2024. Esto dejaría sólo L 296.1 millones disponibles para adquirir los 359 medicamentos restantes, una cantidad claramente insuficiente.
Por lo anterior, ASJ urge a la Sesal a instalar una unidad de compras con el personal calificado, experiencia y conocimiento técnico, que garantice procesos eficientes y transparentes que aseguren el abastecimiento oportuno de medicamentos en el sistema de salud pública. Además, insta a las autoridades a priorizar la obtención de precios competitivos para optimizar el uso de los recursos disponibles y revisar el aumento en las cantidades solicitadas, que podría causar retrasos por la limitada capacidad de almacenaje.