Ecuador celebra este domingo la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en las que debe decidir si reelige al actual presidente, Daniel Noboa, o si devuelve al correísmo al poder tras ocho años en la oposición, de la mano de Luisa González,que se convertiría en la primera presidenta de la historia del país en ser elegida en las urnas.
El sábado, el presidente Daniel Noboa decretó el estado de excepción por 60 días en siete provincias y dos municipios y en las cárceles del país.
La Asamblea Nacional, de mayoría opositora y liderada por el correísmo, expresó el sábado su preocupación por la medida decretada por Noboa. “Las medidas impuestas -cierre de fronteras, restricciones al tránsito, levantamiento de la inviolabilidad del domicilio y prohibición de reuniones- generan preocupación en tanto los limites al derecho de reunión, afecten el normal desarrollo del escrutinio y alteren el orden democráticoy, por tanto, el desarrollo de un proceso electoral transparente, pacífico y legítimo”, señaló en un comunicado.
Para la Asamblea, con estas medidas el Ejecutivo “pone en entredicho la legitimidad del estado de excepción decretado”.
Recordó que la Corte Constitucional, señala que toda restricción a derechos fundamentales, incluso en estados de excepción, debe cumplir con los “principios de idoneidad, necesidad y proporcionalidad”.
Asimismo, las medidas excepcionales, que tienen que ver con el combate a la delincuencia organizada, “no deben afectar la integridad, la propiedad, ni las garantías fundamentales de las personas”, añade.
“Esta Asamblea Nacional ratifica que las elecciones presidenciales deben desarrollarse en un ambiente de paz, civismo y espíritu democrático, sin restricciones indebidas, temores ni aislamiento”, reza el comunicado que finaliza con el señalamiento de que permanecerán “atentos y firmes en defensa de la voluntad” del pueblo.
El estado de excepción durará 60 días e incluye el toque de queda y la restricción de la movilidad, en las provincias de Guayas, Los Ríos, Manabí, Orellana, Santa Elena, El Oro y Sucumbíos, así como al Distrito Metropolitano de Quito (provincia de Pichincha) y el municipio Camilo Ponce (provincia del Azuay).
El decreto, que también incluye a los centros de privación de libertad del Sistema Nacional de Rehabilitación Social, prevé medidas como suspender el derecho a la inviolabilidad de domicilio y de correspondencia.
Además, dispone el toque de queda en 22 municipios desde las 22:00 hora local a 05:00 hora local, todos los días, una medida que no incluye a Quito.
Noboa dispuso, asimismo, la movilización de la Policía y Fuerzas Armadas en el país, que está bajo declaratoria de ‘conflicto armado interno’ desde enero de 2024cuando Noboa declaró “la guerra” a los grupos criminales, a los que pasó a llamar “terroristas”.
Noboa decretó el estado de excepción aduciendo “grave conmoción interna” ante el incremento de los índices de violencia, comisión de delitos e intensidad de la perpetración de ilícitos por grupos armados organizados en las mencionadas zonas y las cárceles, donde en años anteriores se han registrado masacres entre grupos rivales de reos.
El gobernante justifica los dos meses de vigencia por “la necesidad de contar con el tiempo adecuado para mitigar los hechos fácticos planteados y coadyuvar el accionar de las Fuerzas Armadas para mantener la soberanía y la integridad del Estado, y la Policía Nacional en seguridad ciudadana, protección interna y orden público “encaminados a la seguridad integral del Estado”.
Más de 13.7 millones de ecuatorianos están convocados a las urnas este domingo para decidir si reeligen a Noboa para un mandato completo (2025-2029) o devuelven al correísmo al poder, lo que convertiría a González en la primera mujer en la historia de Ecuador en ganar unas elecciones presidenciales.
Un total de 94,123 observadores han acreditado los grupos políticos que postulan a Daniel Noboa y a González para la segunda vuelta presidencial y de la que se cumplió el voto anticipado entre el jueves y viernes en las cárceles y en los domicilios de personas mayores de 50 años con discapacidad superior al 75 %, acreditadas para el proceso.
Además de los observadores acreditados por las agrupaciones políticas, también estarán presentes en el proceso delegados internacionales de la Unión Europea (UE) y de la Organización de Estados Americanos (OEA), entre otros.
Noboa busca construir la idea de fraude: González
La candidata Luisa González aseguró la noche del sábado en un video difundido en sus redes sociales que recibió información de que “a través de montajes y operativos están sembrando actas de votación en diferentes regiones del país”.
Apuntó que Noboa pretende con estas acciones, que denominó como “falsos positivos”, buscan construir la idea de fraude “ante su inminente derrota”, por lo que llamó a las Fuerzas Armadas y a la policía para que “no se presten a este show”.
“Hago un llamado a las Fuerzas Armadas, a nuestra Policía Nacional, a que no se presten a este show que solo desestabiliza y debilita más la poca democracia que nos queda. Sean garantes de la democracia y de la paz.Y a toda la ciudadanía, vamos a votar con esperanza. Y a los organismos internacionales y a los veedores, estén vigilantes de los atropellos que vive nuestro país. Señor Noboa, usted tiene el miedo; la esperanza es nuestra”, dijo.
En la primera vuelta, realizada el pasado 9 de febrero, Noboa logró el 51.83 % de los votos frente al 48.17 % de González, pero ahora el balotaje se prevé aún más ajustado, con una polarización que en la primera vuelta hizo que la separación entre ambos fuese de poco más de 16,000 votos.
El ganador gobernará Ecuador por los próximos cuatro años (2025-2029) y la elección implica dos modelos opuestos de entender el Estado y de relacionarse con el mundo.
Noboa, candidato y líder de Acción Democrática Nacional (ADN) anunció que, si gana, promoverá una Asamblea Constituyente que deje atrás la actual Constitución,aprobada durante el mandato de Rafael Correa (2007-2017), para profundizar sus reformas liberales de control del gasto público, atracción de inversión extranjera y flexibilización laboral, entre otros aspectos.
En la esfera internacional tiene a Estados Unidos como su principal respaldo, ha reconocido a Edmundo González Urrutia como presidente electo de Venezuela y está enemistado con numerosos gobiernos de izquierda, especialmente tras ordenar la invasión de la Embajada de México para detener al exvicepresidente correísta Jorge Glas.
Por el otro, la candidata de la Revolución Ciudadana (RC), partido que tiene como líder a Correa, representa el modelo correísta de mayor asistencial social, gasto público y redistribución de la riqueza con un mayor control sobre la economía, mientras que ya ha anticipado que reconocerá a Nicolás Maduro como presidente de Venezuela y restablecerá relaciones con México.
Después de una campaña electoral plagada de ataques, insultos e improperios, la igualdad se mantiene entre ambos candidatos, si bien González ha hecho un esfuerzo por aglutinar en torno a ella a otras fuerzas políticas para crear un Gobierno de “unidad”. “No habrá persecución”, ha prometido.
La correísta firmó un pacto para sumar a otras fuerzas de izquierda, entre ellas a Pachakutik, el brazo político del movimiento indígena, cuyo candidato presidencial Leonidas Iza, obtuvo más de medio millón de votos en la primera vuelta que se prevén decisivos en este balotaje, si bien hay otras organizaciones indígenas que han anunciado su apoyo a Noboa.
También ha anticipado la posibilidad de contar dentro de su gabinete con el excandidato presidencial Jan Topic, de centroderecha, quien no pudo competir en estas elecciones al ser inhabilitado por una impugnación que él achaca a Noboa, ya que el exlegionario y empresario especialista en seguridad se perfilaba como un serio rival para desbancarlo.
Mientras, Noboa ha querido hacer gala de sus conexiones internacionales al mantener un encuentro privado con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en Mar-a-Lago (Florida) y ha buscado redoblar los esfuerzos en el combate con “mano dura” a las bandas criminales, incluida una visita del fundador de la empresa de seguridad privada Blackwater, Erik Prince, como asesor del Gobierno.
Elecciones bajo crisis de violencia criminal
La inseguridad se mantiene como la principal preocupación de los ecuatorianos ante la escalada de violencia que ha llevado a situar a Ecuador a la cabeza de Latinoamérica en índice de homicidios, recrudecida en este inicio de 2025 con un promedio de un asesinato por hora.
Así, para esta jornada electoral vuelven a desplegarse alrededor de 100,000 miembros de las fuerzas de seguridad para proteger los recintos electorales, entre ellos unos 60,000 policías y 40,000 militares.
Ante un resultado que se prevé tan ajustado, está por ver la reacción de los candidatos que ya en la primera vuelta denunciaron sin pruebas irregularidades en la votación y en el escrutinio, lo que rápidamente fue descartado por las misiones de observación electoral de la Unión Europea (UE) y de la Organización de Estados Americanos (OEA), que no vieron indicios de “fraude”.
Noboa llegó a afirmar que presuntamente bandas criminales habían extorsionado a electores para votar por González, y consiguió que el Consejo Nacional Electoral (CNE), en una polémica decisión, prohibiera para esta segunda vuelta votar con el teléfono en la mano, al entender que puede ser usado para fotografiar la papeleta como prueba del voto.
Con información de EFE