TEGUCIGALPA, HONDURAS.
En respuesta a la emergencia carcelaria que afronta el Estado ante los hechos violentos suscitados dentro de la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS), un equipo multidisciplinario del Ministerio Público se desplazó a la zona de crisis para el procesamiento de las diferentes escenas del crimen y labores de levantamientos cadavéricos.
Preliminarmente, se tiene conocimiento que 41 personas han perdido la vida, no obstante, será en el transcurso de las diligencias en el lugar de los hechos que se tendrá mayor información al respecto.
Para ello, cinco grupos de Medicina Forense, dos de la Fiscalía Especial de Delitos Contra la Vida (FEDCV), uno de la Fiscalía Especial de Derechos Humanos (FEDH) y uno de la Fiscalía de Turno coordinan los trabajos in situ con personal técnico de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
Entre los análisis que los equipos de especialistas forenses practicarán para el reconocimiento de las víctimas (identificación humana), se auxiliarán de pruebas de necrodactiloscopia (huellas), autopista oral (estudios odontológicos que revelarán estimación de edad, sexo, entre otros) e investigación de comparación genética (para los casos de quemaduras graves o carbonación).
Una vez que los cuerpos sean trasladados al servicio de morgue, los médicos y técnicos efectuarán las autopsias y harán las entregas a los familiares de los cadáveres plenamente identificados, sin embargo, se solicita comprensión a la población en cuanto a los términos de entrega en los casos en los cuales se requieran estudios de ADN.
En tanto, las tareas fiscales y policiales se orientarán en fijar y levantar indicios para conducir una eventual causa penal bajo los principios de la investigación criminal.