La relación bilateral ha sido tensa desde que Pedro Castillo fue destituido en 2022.
(RT en Español)- La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, cuestionó este martes la sorpresiva medida que tomó el presidente interino de Perú, José Jerí, de romper relaciones diplomáticas entre ambos países.
«Desde nuestra perspectiva está fuera de toda proporción, pero es una decisión que ellos toman», lamentó la mandataria en una rueda de prensa en la que aclaró que la relación consular se mantiene abierta para resolver los trámites de los mexicanos y los peruanos en ambos países.
También advirtió que el Gobierno de Perú todavía no ha notificado oficialmente a México de la ruptura de relaciones, ya que hasta ahora el anuncio se ha basado en declaraciones; y lo diferenció del caso de Ecuador, en donde México fue el país que puso fin al vínculo bilateral el año pasado por la invasión que el Gobierno de Daniel Noboa llevó a cabo en la embajada en Quito.
El canciller del Perú, Hugo de Zela, anunció la víspera el quiebre con México luego de constatar que la ex jefa de Gabinete peruana, Betssy Chávez, había sido asilada en la residencia de la Embajada de México en Lima. Además, criticó a Sheinbaum por sus «expresiones inaceptables y falsas» sobre el expresidente Pedro Castillo, a quien el Gobierno mexicano considera un perseguido político.
Derecho al asilo
En respuesta, la presidenta ratificó su posición e insistió en que la detención de Castillo, ocurrida en diciembre de 2022, fue «totalmente injusta» porque respondió a intereses políticos y a la discriminación de un sector de la política peruana por la identidad indígena del exmandatario.
Por eso, recordó, México asiló primero a la familia de Castillo y cuando Chávez solicitó la misma protección, se le brindó y se le permitió entrar en la embajada mexicana en Lima, en donde permanece hasta ahora.
La víspera, la Cancillería mexicana emitió un comunicado en el que lamentó y rechazó la decisión unilateral del Perú por considerar que se contrapone a una medida que el Gobierno de Sheinbaum tomó con base en el derecho internacional para proteger a Chávez.
«México seguirá fiel a su tradición humanista de defender los derechos humanos y de brindar protección a personas perseguidas por razones políticas. Asimismo, siempre privilegiará el diálogo y la solución amistosa de controversias», señaló.











