- Germán Lobo sostiene que la Ley Electoral no obliga a que las Juntas Especiales estén integradas solo por partidos políticos y afirma que el CNE puede recurrir a universidades, iglesias y sociedad civil
TEGUCIGALPA, HONDURAS. –
Ante la falta de instalación del escrutinio especial y el prolongado estancamiento del proceso electoral, el exconsejero del Consejo Nacional Electoral (CNE), Germán Lobo, aseguró que la Ley Electoral no establece que las Juntas Especiales de Verificación y Recuento deban estar integradas exclusivamente por representantes de partidos políticos, por lo que el órgano electoral tiene margen legal para adoptar medidas alternativas.
Lobo explicó que, al analizar el artículo 295 de la Ley Electoral, la normativa únicamente señala que dichas juntas deben conformarse de manera similar a las Juntas Receptoras de Votos (JRV), pero en ningún momento limita su integración únicamente a militantes o delegados partidarios.
“La ley no dice que tengan que ser solo partidos políticos. Dice que deben integrarse de manera similar a las JRV, y eso abre una interpretación legal válida”, sostuvo el exfuncionario electoral.
En ese sentido, advirtió que, si persiste la negativa o el bloqueo por parte de los partidos para integrar las Juntas Especiales, el CNE tiene plena potestad legal para sustituirlos y continuar con su trabajo, evitando que el proceso electoral siga paralizado.
“Si persiste este comportamiento, el Consejo Nacional Electoral puede buscar otros mecanismos para sustituirlos y avanzar en el escrutinio”, afirmó Lobo, al subrayar que el derecho ciudadano a conocer los resultados no puede quedar rehén de disputas políticas.
El exconsejero fue más allá al señalar que el CNE incluso podría convocar a actores externos para integrar las Juntas Especiales, como universidades, iglesias, organizaciones de la sociedad civil y gremios profesionales, siempre bajo un marco legal y de transparencia.
Entre las entidades que podrían participar, mencionó expresamente a universidades, iglesias, organizaciones sociales y colegios profesionales, sectores que —dijo— cuentan con legitimidad social y podrían aportar credibilidad al proceso.
Para Lobo, una decisión de este tipo no solo sería legal, sino que representaría un precedente histórico para el sistema democrático hondureño.
“Sería un paso hacia una verdadera ciudadanización del proceso electoral, rompiendo la dependencia exclusiva de los partidos políticos”, puntualizó.
Las declaraciones del exconsejero se producen en un contexto de creciente tensión postelectoral, marcado por retrasos en el escrutinio especial, acusaciones cruzadas entre fuerzas políticas y una creciente desconfianza ciudadana en el desarrollo del proceso.
Mientras el país permanece a la espera de resultados definitivos, la propuesta de Lobo reabre el debate sobre la necesidad de reformar los mecanismos de control electoral y reducir la influencia partidaria directa en etapas clave del conteo, como una vía para fortalecer la transparencia y la credibilidad democrática.








