TEGUCIGALPA, HONDURAS.
El director del Foro Social para la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (Fosdeh), Mauricio Díaz Burdett, expresó que “es un cheque en blanco” decretar un estado de emergencia para el uso de recursos sin procesos de licitación.
Sin embargo, dijo confiar en que los actuales funcionarios rindan cuentas en el momento oportuno.
Subrayó “esperamos que aunque se dé ese cheque en blanco, llegue el momento que se presenten las cuentas y que se haga bien”.
Ala vez, lamentó que los gobiernos en Honduras no planifiquen adecuadamente, pese a ser un país donde el riesgo climático es latente al ubicarlo entre las naciones más vulnerables del planeta.
Refirió que la discrecionalidad facilita mucho el gasto público porque las restricciones disminuyen o desaparecen.
Destacó “el nivel de opacidad toma mucha fuerza porque se puede usar el dinero de manera indebida. Esto nos dice claramente que en 90 días se está pensando hacer cierto nivel de recuperación”.
Sin embargo, dijo que “el impacto de lo que hasta ahora ha ocurrido es un asunto que trasciende, incluso, esta administración de gobierno y seguramente habrá que contemplar el tema en término de cinco o 10 años, porque es recurrente que prácticamente todos los años, si no hay sequía hay inundaciones frecuentes”.
Puntualizó que la ausencia de planificación, esfuerzos orientados a la rendición de cuentas, seguramente repetidas en décadas, la construcción de bordos que llegan al extremo de ser edificados de tierra o adobe, “eso plantea que hemos botado el dinero, miles de millones de lempiras, que seguramente son miles de millones de dólares por mucho tiempo”.