Lula da Silva rebautizó el organismo responsable por las políticas para los pueblos indígenas desde hace 55 años para excluir de su nombre el término “indio”
El Gobierno del nuevo presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, rebautizó el organismo responsable por las políticas para los pueblos indígenas desde hace 55 años para excluir de su nombre el término “indio“, considerado discriminatorio y colonizador, dijeron fuentes oficiales.
La Fundación Nacional del Indio (Funai), creada en 1967 y que ha sido la principal impulsora y ejecutora de las políticas para los pueblos indígenas en Brasil, pasó a llamarse Fundación Nacional de los Pueblos Indígenas (Funai) a partir de un decreto publicado por el líder progresista el pasado lunes.
“Indio es una palabra adoptada por los colonizadores para definirnos, pero desde hace ya algunos años nosotros venimos usando el término indígenas, que significa ‘originario‘, aquel que estaba aquí antes de los otros”, explicó la líder indígena Sônia Guajajara, que el domingo asumió como titular del inédito Ministerio de los Pueblos Indígenas.
El cambio responde a la decisión del líder del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT) de impulsar una nueva política para los indígenas que los tenga como protagonistas, e igualmente a la política de promover un lenguaje incluyente, no solo para los géneros sino también para las razas.
Según la nueva ministra, representante de los Guajajara/Tentehar, una etnia que vive en la reserva indígena Araribóia, en el estado amazónico de Maranhao, el nuevo nombre de la Funai representa y valoriza la diversidad de los pueblos indígenas brasileños.
“Por eso, en este momento de retomada, es fundamental que renombremos órganos institucionales, como la Funai, que actúa en la defensa y la promoción de nuestros derechos y tienen que garantizar nuestro sentimiento de pertenencia a nuestro pueblo”, afirmó la activista elegida el año pasado por la revista Time como una de las cien personalidades más influyentes del mundo.
Guajajara, elegida diputada en las elecciones legislativas del pasado 2 de octubre, agregó que el término “indio” también es considerado impreciso por los especialistas, ya que generaliza las más de 300 etnias existentes en Brasil.
En el mismo sentido se pronunció la diputada federal y abogada Joenia Wapichana, que el lunes se convirtió en la primera mujer indígena en asumir la presidencia de la Funai.
“Es un momento histórico para los pueblos indígenas de Brasil, que, después de tanta afronta y retroceso, y con el único órgano indigenista totalmente desmantelado, podamos retomar la Funai. Una Funai que ahora sí podemos decir que es nuestra”, afirmó Wapichana al criticar las políticas del ahora expresidente Jair Bolsonaro.
El líder ultraderechista no solo cumplió su promesa de no delimitar ninguna nueva reserva indígena durante su Gobierno, sino que impulsó iniciativas que las pusieron en peligro, como la de autorizar la minería en las reservas existentes.
El cambio de nombre de la Funai fue una de las peticiones hechas por la Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (Apib) al grupo del equipo de transición de Lula que analizó la situación de los pueblos originarios.
Con información de EFE