• El vocero de la Conferencia Episcopal exhorta a orar, votar temprano y “cuidar el voto”, mientras el país llega a sus duodécimos comicios bajo tensiones, desconfianza y un estado de excepción cuestionado.
TEGUCIGALPA, HONDURAS.
A pocas horas de que Honduras acuda nuevamente a las urnas, el sacerdote Juan Ángel López, vocero de la Conferencia Episcopal de Honduras (CEH), hizo un llamado a la ciudadanía a enfrentar la jornada electoral con serenidad, participación masiva y vigilancia activa del proceso.
En un mensaje directo a la población, López subrayó que el primer paso es orar y pedir discernimiento a Dios, para luego salir temprano a votar y, finalmente, cuidar el voto como un acto de responsabilidad cívica.
“Lo primero que debemos hacer es orar y pedir discernimiento a Dios. Luego se debe salir a votar masivamente, y si es temprano, mejor. Posteriormente debemos cuidar el voto; todos podemos ser veedores de la democracia”, expresó.
El sacerdote también recomendó a los hondureños tomar fotografías del proceso y de los resultados como una forma de documentar y dar seguimiento al escrutinio, en un contexto donde la transparencia está bajo la lupa.
“No tener miedo”: un mensaje para ciudadanos y políticos
López insistió en que los hondureños deben acudir a votar sin temor, con confianza y esperanza en que su voluntad será respetada.
“Los hondureños no podemos tener miedo; con esperanza vamos a votar.
La paz se alcanza con justicia y verdad, no tenemos que tener miedo”, reiteró.
El mensaje también incluyó un recordatorio a la clase política: aceptar los resultados, sea cual sea el desenlace de la jornada electoral.
Un país que llega a las urnas entre dudas y tensiones
El llamado de la Iglesia se da en medio de un ambiente electoral marcado por tensiones, denuncias de falta de transparencia y temor a episodios de violencia.
Los comicios de este año serán los duodécimos desde el retorno al orden constitucional en 1980, luego de casi dos décadas de gobiernos militares.
Sin embargo, se celebran bajo un estado de excepción vigente desde diciembre de 2022, una medida que ha sido cuestionada por organizaciones civiles y que ha despertado preocupación sobre las condiciones reales para un escrutinio confiable.
A ello se suma un clima social desgastado por pobreza —que afecta a más del 60 % de los diez millones de habitantes—, desempleo, inseguridad y corrupción, factores que han profundizado la desconfianza hacia las instituciones y la clase política.
Un proceso electoral clave para el futuro inmediato
Este domingo, los hondureños no solo elegirán al sucesor de la presidenta Xiomara Castro, sino también a:
• Tres designados presidenciales (vicepresidentes)
• 298 corporaciones municipales
• 128 diputados al Congreso Nacional
• 20 diputados al Parlamento Centroamericano
La magnitud del proceso y el ambiente de incertidumbre elevan la importancia de la participación ciudadana y de la vigilancia activa, pilares que la Conferencia Episcopal resalta como esenciales para resguardar la democracia.
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