El Inter Miami se clasificó este viernes para las semifinales de la Leagues Cup al imponerse al Charlotte FC por 4-0 en un partido en el que Leo Messi marcó el último tanto de la goleada del equipo de Florida.
Fue el encuentro en el que menos necesitó aparecer el argentino, sin que los de Gerardo ‘Tata‘ Martino lo acusaran. El conjunto de rosa se jugará un puesto en la final de la Leagues Cup frente al vencedor del partido de cuartos entre el Philadelphia Union y el Querétaro.
El técnico argentino sólo incluyó una novedad en el once, la de Benjamín Cremaschi, uno de los héroes de la remontada en Dallas y que se ganó la titularidad en detrimento del paraguayo Diego Gómez.
El Inter Miami saltó al césped queriendo la pelota, proponiendo ante un Charlotte echado atrás y apostando claramente por la contra sin que por eso se viera afectada en los de Martino una transición defensiva que sigue mostrando mejorías y en la que el excelente trabajo de Sergio Busquets tiene mucho que ver.
La polémica llegó en el minuto 10, consecuencia del ataque insistente de los locales, primero por una clara mano dentro del área de Charlotte que no tuvo consecuencias y después por el derribo de Harrison Afful sobre Dixon Arroyo que sí fue señalado.
El venezolano Josef Martínez asumió la responsabilidad desde los once metros, pese a que el penalti no lo generó él, y lo transformó engañando completamente al croata Kristijan Kahlina. Es su segundo gol en la Leagues Cup, ambos de pena máxima.
A partir del minuto 20, Charlotte dio un paso al frente y el equipo dirigido por el italiano Christian Lattanzio comenzó a ser protagonista con la pelota, acercándose de manera más regular al área local pero sin poner en apuros a Drake Callender.
En cambio, las llegadas del Inter Miami sí inquietaban a la defensa de Charlotte.
Así, en una gran jugada en el minuto 32, el centro del campo local encontró en un pase largo la llegada de DeAndre Yedlin por la derecha, quien se inventó un servicio al corazón del área por donde llegó completamente solo el finlandés Robert Taylor para poner el segundo.
Este es el cuarto gol para él, lo que le confirma como la gran revelación del equipo desde la llegada de Messi. Hasta entonces, Taylor había convertido únicamente dos tantos en 19 partidos en la MLS.
Al descanso, el marcador reflejaba lo visto en el terreno de juego. La propuesta de Charlotte era muy pobre y poco efectiva, buscando el área pequeña de Miami siempre por alto, donde Callender jamás tuvo problemas para proteger la pelota.
Movió el banquillo al descanso Charlotte, dando entrada al belga Brecht Dejaeghere y el ghanés Patrick Agyemang. Lo notaron positivamente en ataque y así lograron su primer disparo a puerta en el minuto 54. Lo resolvió bien Callender bajo palos.
La primera oportunidad clara de Messi para hacer gol tardó en llegar. Fue en el minuto 68 en una gran jugada colectiva en la que recibió el pase de Taylor dentro del área, pero su tiro golpeó en un defensor y se marchó a córner.
De sus botas nació el tercero, arrancando la jugada, conduciendo el balón por el pasillo central y cediéndola a la izquierda para un Diego Gómez que acababa de entrar desde el banquillo. El paraguayo se la regaló al ecuatoriano Leonardo Campana, pero no le llegó la pelota ya que el defensor francés Adilson Malanda la puso en su portería. Era la sentencia en el 78.
No obstante, una fiesta del DRV PNK Stadium no está completa sin un gol de Messi y el argentino no faltó a la cita anotando el cuarto que remató el partido en el 86. Un buen pase de Campana entre la defensa visitante encontró su zurda y en esta ocasión fue Spider-Man el superhéroe elegido para la celebración.
Con este tanto, Messi ya lleva ocho dianas en solo cinco partidos con el Inter Miami.
Pese a la ligera mejoría de Charlotte, el Inter Miami tuvo siempre el partido controlado y fue capaz de probar cosas nuevas y saltarse el guion establecido. Así, se pudo ver a Jordi Alba cambiando de banda para actuar de extremo en una ocasión.
Con información de EFE