FRANCISCO MORAZÁN, HONDURAS.
En las cárceles deben luchar incluso contra nosotros mismos debido a las operaciones utilizadas por la criminalidad para vulnerar la seguridad en los recintos, declaró este lunes, el director del Instituto Nacional Penitenciario (INP), Ramiro Muñoz.
Amplió que, “estos miembros de maras y pandillas también buscan la forma de burlar a las autoridades y creen que comprando conciencias van a pasar por encima de la ley, pero los controles que se han implementado no han permitido que entren armas y droga a estos espacios”.
Además, “nosotros vamos estar luchando todo el tiempo con el tráfico que se da adentro, porque quien mete lo ilícito, tiene que ser personal penitenciario y contra eso se está luchando porque un agente gana 17 mil lempiras, pero vienen estos y ofrecen 300 mil lempiras por meter un celular, sólo queda luchar contra nosotros mismos”, remarcó.
Afirmó que, suman más de una veintena de agentes penitenciarios privados de libertad por intentar cometer ilícitos.
También que, los miembros de maras y pandillas estarán separados de los detenidos por narcotráfico.
Puntualizó que, se socializó las medidas que se tomarán en las cárceles de máxima seguridad, donde la distribución de los privados se realizará conforme al delito que cometen.
Igualmente se debatió con defensores de derechos humanos estas nuevas disposiciones a lo interno de los centros penales del país, añadió.
Reveló que, se está buscando la separación de la población en las granjas penales, esto con motivo de mantener en cada área a un grupo delictivo, indicó.
Concluyó que, “la distribución ha sido socializada, tenemos nuevas construcciones, maras y pandillas deben estar separadas, narcotraficantes estarán en un solo espacio en Ilama, los extorsionadores y violadores también”.