TEGUCIGALPA, HONDURAS.
La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, designó a la subsecretaria de Seguridad, Julissa Villanueva, para liderar el plan de intervención de los centros penales del país, tras los tiroteos registrados el fin de semana en al menos cuatro cárceles.
«Con el fin de desmontar las estructuras criminales que operan en Centros Penitenciarios, he nombrado a la Doctora Julissa @VillanuevaSemma para presidir este plan de intervención, SCC, apoyada por Instituto Penitenciario y Policía Nacional», indicó Castro en un mensaje en Twitter.
La mandataria hondureña señaló que Villanueva anunciará el viernes las medidas que contemplará el plan de intervención del sistema penitenciario, compuesto por 26 centros.
La intervención de los centros penales fue anunciada este domingo por Castro, un día después de que un preso murió y diez resultaron heridos en enfrentamientos simultáneos entre pandilleros en cuatro prisiones de Honduras.
La presidenta Castro indicó en la víspera que la «intervención será dura, pero respetuosa de la humanidad de los encausados, sus familiares y defensores. El crimen se combate desde la prevención no solo con el castigo».
«Voy a poner mano dura y orden en las cárceles, hasta transformarlas en Centros Penales de rehabilitación, no en escuelas de crimen y tortura como lo que he heredado», señaló.
Por su parte, el canciller hondureño, Eduardo Enrique Reina, se refirió al tema y dijo que se «cumplirá» con el respeto y protección de los derechos humanos de los hondureños, incluyendo los de los reclusos durante la intervención de las cárceles anunciada por Castro.
«El Gobierno de Honduras cumplirá con la ley y compromisos internacionales de velar por el respeto y protección de DDHH, de todo el pueblo hondureño. Manteniendo un equilibrio con la lucha directa contra el crimen en todas sus manifestaciones incluyendo los centros penales», subrayó Reina en un mensaje en Twitter.
El canciller se pronunció así en reacción a un comunicado divulgado este domingo por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Honduras (Oacnudh), en el que pide al Estado tomar «medidas urgentes» para garantizar la seguridad de los reclusos tras los últimos tiroteos registrados en cárceles del país.
La Oacnudh indicó que los episodios de violencia en las cárceles de Honduras evidencia «la deficiencia estructural en materia de hacinamiento, gestión penitenciaria y garantía de seguridad integral de las personas privadas de libertad».
En las cárceles de Honduras impera la sobrepoblación y el hacinamiento, la falta de instalaciones físicas adecuadas y seguras para el alojamiento de los reclusos, las condiciones de higiene y salubridad son deplorables.
El sistema penitenciario de Honduras alberga a 19.658 presos, cuando su capacidad máxima es de 8.000, y menos de la mitad de los reclusos han sido sentenciados, según cifras oficiales.
Con información de EFE
