El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, anunció este miércoles que reflexionará si renuncia o no a la jefatura del Ejecutivo tras la denuncia contra su esposa, Begoña Gómez, por supuesta corrupción, en una «carta a la ciudadanía» que se puede resumir en diez frases:
«Me urge responderme a la pregunta de si merece la pena, pese al fango en el que la derecha y la ultraderecha pretenden convertir la política. Si debo continuar al frente del Gobierno o renunciar a este alto honor». «¿Merece la pena todo esto?».
- «No me causa rubor decirlo, soy un hombre profundamente enamorado de mi mujer que vive con impotencia el fango que sobre ella esparcen día sí y día también».
- «Se trata de una operación de acoso y derribo por tierra, mar y aire, para intentar hacerme desfallecer en lo político y en lo personal atacando a mi esposa».
- «A pesar de la caricatura que la derecha y la ultraderecha política y mediática han tratado de hacer de mí, nunca he tenido apego al cargo».
- «Esta estrategia de acoso y derribo lleva meses perpetrándose».
- «Sin ningún rubor, el Sr. Feijóo (líder del conservador Partido Popular) y el Sr. Abascal (al frente del ultraderechista Vox), y los intereses que les mueven, han puesto en marcha lo que el gran escritor italiano Umberto Eco llamó ‘la máquina del fango’».
- Feijóo y Abascal «son colaboradores necesarios junto a una galaxia digital ultraderechista y la organización ultraderechista Manos Limpias (impulsora de la denuncia contra su esposa)».
- «Fueron conscientes de que con el ataque político no sería suficiente y ahora han traspasado la línea del respeto a la vida familiar de un presidente del Gobierno y el ataque a su vida personal».
- «No soy un ingenuo. Soy consciente de que denuncian a Begoña no porque haya hecho algo ilegal, ellos saben que no hay caso, sino por ser mi esposa».
- «Begoña defenderá su honorabiliidad y colaborará con la Justicia en todo lo que se la requiera para esclarecer unos hechos tan escandalosos en apariencia como inexistentes».
- «Muchas veces se nos olvida que tras los políticos hay personas».
Con información de EFE