La diputada liberal responsabiliza directamente al Ejecutivo y Legislativo por usar recursos públicos para campañas políticas y pide la renuncia de la presidenta y de la junta directiva del Congreso.
TEGUCIGALPA, HONDURAS.
La diputada y abogada constitucionalista Maribel Espinoza lanzó este sábado una contundente acusación contra el partido de gobierno Libertad y Refundación (Libre), al afirmar que el llamado “fondo social” —recientemente defendido por el oficialismo— no es más que un mecanismo disfrazado del antiguo fondo departamental para beneficiar a candidatos y estructuras partidarias.
En una publicación hecha desde su cuenta oficial en la red social X, Espinoza no se anduvo con rodeos:
“¿Si el ‘fondo social’ es creación de Libre, quién es el beneficiario final del famoso fondo social (nuevo disfraz del fondo departamental)? R= El Partido Libre y todos sus candidatos”.
La diputada liberal cuestionó duramente que tanto el Ejecutivo como el Legislativo intenten desligarse del escándalo, cuando —según ella— ambos poderes coordinaron su implementación desde el inicio.
“¿Era posible que los titulares del poder Ejecutivo y Legislativo desconocieran los anteriores hechos si ellos mismos lo implementaron? R= ¡Nooooo!”
Con esta afirmación, Espinoza deja claro que no se trató de un acto aislado ni de excesos de algunos funcionarios, sino de una estructura planificada desde las más altas esferas del gobierno, con fines electorales.
Además, acusó al partido Libre de haber promovido la corrupción en lugar de combatirla, y de hacer uso de bienes y servicios del Estado para su campaña política.
“No se pueden desligar de ese nauseabundo asunto porque es claro que todo lo hicieron fue para el beneficio de sus candidatos y su partido”.
Frente a lo que califica como una crisis ética y política de gran magnitud, la diputada liberal propuso una solución radical:
“Que renuncie la señora presidenta de la República y que la sustituya un designado. Y que renuncie quien preside el Congreso Nacional y toda su junta directiva”.
Espinoza considera que cualquier otra medida es “cuento chino” para distraer a la población y victimizar a los responsables. Su mensaje busca despertar a una ciudadanía que —según sus palabras— está siendo manipulada por narrativas que desvían la atención de lo fundamental: el uso sistemático de recursos públicos para fines políticos.
Las declaraciones de Espinoza se suman a una creciente ola de críticas desde distintos sectores que acusan al oficialismo de encubrir actos de corrupción y manipular estructuras del Estado para consolidar poder político, bajo una fachada de “refundación” que cada vez convence a menos.
