TEGUCIGALPA, HONDURAS.
La tragedia silenciosa de la violencia contra las mujeres en Honduras continúa cobrando vidas sin que el Estado dé una respuesta efectiva. Entre el 1 de enero y el 2 de junio de este año, al menos 110 mujeres han sido asesinadas violentamente, denunció este miércoles la defensora de derechos humanos Honorina Rodríguez, quien exigió justicia y acción institucional urgente.
“Todo lo que tiene que ver con los femicidios y muertes violentas de mujeres en el país va en incremento cada día”, advirtió Rodríguez, en un contexto donde las cifras no solo crecen, sino que reflejan el fracaso de las políticas públicas en materia de seguridad y prevención.
Feminicidios sin justicia, cifras sin respuesta
La defensora fue tajante al denunciar la impunidad: solo entre el 10% y 12% de los casos reciben respuesta judicial, lo que significa que casi 9 de cada 10 asesinatos de mujeres quedan en la oscuridad del olvido institucional. Esta impunidad no solo perpetúa el ciclo de violencia, sino que también envía un mensaje devastador: en Honduras, matar a una mujer rara vez tiene consecuencias.
“La diferencia entre los casos atendidos y los impunes es histórica, así como la violencia es histórica”, afirmó Rodríguez, recordando que esta crisis no es nueva, sino sostenida y agravada por la indiferencia de las autoridades.
Violencia estructural e institucionalidad ausente
Pese a los discursos oficiales, la respuesta estatal sigue siendo superficial, fragmentada y reactiva. Rodríguez reiteró la urgencia de un abordaje integral que involucre a todas las instituciones del Estado —Poder Judicial, Policía, Ministerio Público, salud y educación— bajo una estrategia común y articulada para frenar los distintos tipos de violencia que sufren las mujeres: desde la doméstica y sexual, hasta la institucional y letal.
“Hacemos un llamado a los operadores de justicia para encadenar estrategias y demandas, porque hasta ahora cada quien actúa por separado, cuando las mujeres siguen muriendo cada día”, reclamó la activista.
Honduras: entre los países más violentos para ser mujer
Honduras continúa figurando entre los países más peligrosos de América Latina para las mujeres y se mantiene entre los cinco con mayor índice de feminicidios a nivel mundial, según organismos internacionales. Pese a ello, el tema rara vez ocupa la primera línea de la agenda política nacional, dominada por pugnas partidarias y cálculos electorales.
Mientras tanto, la violencia de género se expande con rapidez, afectando no solo a las víctimas directas, sino también a familias, comunidades y a toda una generación de niñas que crecen viendo la normalización de la brutalidad contra su género.
¿Cuántas más?
Las cifras son alarmantes, pero la inacción institucional lo es aún más. Las 110 mujeres asesinadas en lo que va de 2025 no son solo números: son vidas truncadas por un sistema que les falló. Son hijas, madres, amigas, trabajadoras, estudiantes… y también un espejo de la impunidad estructural que impide avanzar hacia una sociedad más justa.
“Justicia para las mujeres no es un eslogan, es una deuda histórica que sigue cobrándose en sangre”, concluyó Rodríguez.
