El alto número de embarazos en adolescentes es uno de los problemas que afronta Honduras en temas de población, una realidad que perpetúa la pobreza en la que se encuentran niñas y jóvenes, dijo este lunes el representante del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), José Manuel Pérez.
El embarazo temprano es un problema que tiene «múltiples aristas» y la educación es un factor clave para su prevención, subrayó Pérez en una entrevista con Efe en Tegucigalpa.
Según cifras del UNFPA, citadas por Pérez, 1 de cada 4 partos es de una menor de 19 años en Honduras, país que ocupa el segundo puesto en América Latina con el mayor número de embarazos en adolescentes, con una tasa de fecundidad de 140 nacimientos por cada 1,000 mujeres.
La maternidad temprana es un fenómeno que debe «llamar la atención», señaló Pérez, quien calificó de «preocupante» los embarazos de niñas menores de 14 años, la mayoría de esas gestaciones tienen su origen en violaciones.
Educación, clave para prevenir embarazos tempranos
La educación sexual es vital para prevenir los embarazos en adolescentes en Honduras, un tema tabú entre muchos padres, así como orientar a los jóvenes con información científica y veraz, afirmó el diplomático del UNFPA.
Por ello, destacó la necesidad de incorporar la educación integral en sexualidad en las escuelas, pero también a través de servicios de salud amigables para adolescentes que «permitan a los jóvenes tener una mejor comprensión de los cambios en su cuerpo».
«Si los chicos tienen preguntas y no encuentran respuestas con fuentes versadas que puedan darles la orientación debida, la van a buscar en otros lados y muchas veces obtienen información equivocada, hay muchos mitos e información falaz», explicó.
Los jóvenes necesitan también «un plan de vida, que sepan a dónde quieren ir, tener el debido cuidado y la prevención si están sexualmente activos, para que la vida de la joven no se vea truncada», señaló.
Una joven embarazada «probablemente no va a terminar la escuela, lo que va significar que tendrá un trabajo informal y si logra tener uno formal, será de bajos ingresos», lo que perpetúa los “ciclos de pobreza”, agregó Pérez.
Más del 73 % de los 9.5 millones de habitantes que tiene Honduras son pobres y el 53 % vive en pobreza extrema, según cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Con la maternidad temprana «también sufre» el país, porque al no alcanzar el desarrollo pleno de las jóvenes madres, Honduras registra «una pérdida de la capacidad productiva», por lo que la problemática debe abordarse desde un enfoque integral, enfatizó el encargado del UNFPA en Tegucigalpa.
Insistió en la necesidad de prevenir los embarazos en menores y regular la fecundidad en adolescentes, para que los jóvenes «no caigan en una situación de estar teniendo niños cuando no tienen la madurez tanto emocional como psicológica».
Pérez dijo que la maternidad en adolescentes en Honduras “debe abordarse, no se puede obviar”, porque los jóvenes “van a tener relaciones”, pero si tienen las “debidas medidas de prevención, las consecuencias negativas se van a poder evitar”.
No tolerar violencia de género
La violencia de género es otro de los grandes problemas que afectan a Honduras, un país donde proliferan las actitudes machistas.
«Hay que ir cambiando ciertos preceptos y aspectos culturales de un machismo mal enfocado (…), e impulsar conciencia sobre que el trabajo en casa es compartido y no solo es responsabilidad de la mujer», indicó Pérez.
El fenómeno de la violencia de género «no tiene cavidad, no podemos tolerarlo, a todas luces es el reflejo de una sociedad que no sabe conversar, no sabe discutir y no sabe encontrar consenso en las diferencias que toda persona pueda tener, es lamentable», enfatizó.
La educación es «la puerta de entrada» para prevenir diferentes problemas, señaló el representante del UNFPA, quien instó a las autoridades a invertir en el sistema educativo.
Honduras es una nación con «una actitud esperanzadora, de oportunidades, de cambio y de un compromiso para lograr ese desarrollo que el país requiere», acotó Pérez, quien exhortó a las autoridades a realizar un censo de población. El último censo se realizó en Honduras en 2013.