De acuerdo con la ONU, Honduras se encuentra por encima del promedio regional de subalimentación al situarse en 15.3 % versus 7.8 % registrado en Latinoamérica y el Caribe.
El nuevo informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) Panorama de la Seguridad Alimentaria y Nutricional (SAN) 2022 reveló que un 49.9 % de la población en Honduras se encuentra en inseguridad alimentaria y nutricional moderada.
Además, el mismo informe señala que un 17.9 % de los hondureños sufren de inseguridad alimentaria severa. Esto, es que no disponen en forma oportuna y permanente de acceso a los alimentos que necesitan en cantidad, calidad y biológicamente aceptables para su adecuado consumo y utilización.
Según el Panorama Regional de la SAN, el costo de una dieta saludable es de 3.48 dólares, pero actualmente el 51.3 % de la población no tiene acceso a ella.
La investigación también detalló que la nación centroamericana se encuentra por encima del promedio regional de subalimentación al situarse en 15.3 % versus 7.8 % registrado en Latinoamérica y el Caribe.
En el país, aproximadamente uno de cada cinco niños presenta desnutrición crónica y el 61.4 % de las mujeres en edad fértil sufre de sobre peso y obesidad.
La representante de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Honduras, Fátima Espinal, indicó que en el país, como en otras naciones de la región, hay factores históricos y estructurales vinculantes como la pobreza y la desigualdad.
«El peso de las múltiples crisis globales ha puesto en peligro el alcance de los objetivos de desarrollo sostenible; particularmente del Hambre Cero (ODS2)», señalóEspinal.
Situación en América Latina
El informe de la ONU asegura que el 22,5 % de las personas en América Latina y el Caribe, es decir unos 131,3 millones de personas, no cuenta con los medios suficientes para acceder a una dieta saludable.
En el Caribe, ese porcentaje se dispara hasta el 52 % de la población. Mientras en Mesoamérica la cifra es del 27,8 % y en América del Sur, del 18,4 %.
Esto representa un aumento de ocho millones con respecto al 2019, a raíz de un mayor costo diario promedio de este tipo de dieta en América Latina y el Caribe comparado con el resto de las regiones del mundo; llegando en el Caribe a un valor de 4.23 dólares, seguido de América del Sur y Mesoamérica con 3.61 y 3.47, respectivamente.
La falta de acceso económico o asequibilidad de una dieta saludable observada en toda la región también está asociada a diferentes indicadores socioeconómicos y nutricionales.
Desigualdad, pobreza e inflación
El informe de la ONU presenta una clara relación entre el nivel de ingresos de un país, la incidencia de la pobreza y el nivel de desigualdad.
Además, el alza en la inflación alimentaria, que se encuentra por encima de la media general, ha incrementado las dificultades para que las personas puedan acceder a una dieta saludable.
El informe incluye recomendaciones y un análisis de políticas para mejorar la disponibilidad y asequibilidad de alimentos nutritivos.
Principalmente, a fin de apoyar a las personas más vulnerables; y a los hogares de bajos ingresos que gastan una mayor proporción de su presupuesto en alimentos.