PERÚ.
(RT)- El Instituto Nacional Materno Perinatal (INMP) de Perú aprobó el aborto terapéutico para una niña de 11 años que había sido violada por su padrastro en la ciudad de Iquitos (Loreto). El organismo concluyó que someter a esta menor, de 22 semanas de gestación, a una interrupción voluntaria del embarazo evitaría «un mal grave o permanente» en su salud física y mental.
«En consecuencia, se inició al procedimiento médico correspondiente, y se mantiene en estricta vigilancia de la evolución clínica de la paciente», indicó el INMP.
La legislación peruana permite el aborto cuando es terapéutico, es decir, cuando se considera un riesgo para la vida o grave y permanente para la salud de la madre. Sin embargo, en el caso de Mila, seudónimo para proteger la identidad de víctima, las autoridades de salud locales se negaron inicialmente a permitir este procedimiento, señala con el diario El Comercio.
Polémica
Esa decisión había sido tomada el pasado 4 de agosto por una junta médica del Hospital Regional de Loreto, «bajo el argumento de que los casos de violación no están incluidos dentro del protocolo del aborto terapéutico», indicó el Poder Judicial del Perú, que cuestionó y rechazó la decisión. «El riesgo contra la vida de una niña de once años por complicaciones con el embarazo, cuyo cuerpo aún no está preparado para el alumbramiento, es incluso mucho más alto», dijo la jueza suprema, Janet Tello Gilardi.
El caso de Mila, conocido a inicios de julio, provocó que familiares, vecinos y organizaciones de derechos humanos exigieran celeridad en la aplicación del aborto terapéutico. El Centro de Promoción y Defensa de los Derechos Sexuales y Reproductivos (Promsex), que representa a la niña, exigió que el Estado cumpliera con sus obligaciones de «garantizar» justicia para la menor y «proteger» su salud y su vida. «Las autoridades, lejos de atender el embarazo de riesgo, no hicieron nada para que la niña recibiera una evaluación médica integral», dijo la organización.
El Ministerio de Salud del Perú se pronunció y resolvió trasladar a la menor el miércoles al INMP, máxima entidad en salud sexual y reproductiva del país, para «proteger su salud y brindarle una mejor atención especializada». Finalmente fue ingresada, evaluada rigurosamente y se le brindó atención integral. El INMP hizo un llamado a «proteger la intimidad» de la paciente en aras de «su salud y desarrollo integral futuro».
El agresor
Se presume que Lucas Pezo Amaringo, padrastro de Mila, habría abusado sexualmente de ella durante por lo menos cuatro años. Las autoridades nunca lograron su captura ni tampoco se decretaron sanciones penales en su contra.
«La madre, mujer extremadamente pobre, analfabeta, ha sido también víctima sistemática de diversas formas de violencia por parte del mismo agresor; así como los hermanos de la niña, de 7 y 3 años. Para las instituciones tutelares de Iquitos, estos hechos no han sido ajenos desde hace varios años, sin embargo, no se procuró ninguna medida efectiva que pudiera protegerlos y evitar estas terribles consecuencias», asevera Promsex.
En este contexto, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) solicitó esta semana a la Corte Superior de Justicia de Loreto la detención inmediata de Amaringo, de 41 años, que «se encuentra libre con comparecencia restringida» a pesar de la gravedad de las acusaciones. «La Ley 30364 dispone que el Poder Judicial actúe con diligencia en casos de violencia, considerando el interés superior de la niña y garantizando su acceso a la justicia, lo que no ha sucedido hasta la fecha», alegó el MIMP.
De acuerdo con información suministrada por El Comercio este sábado, el Poder Judicial programó para el próximo 16 de agosto la audiencia de apelación al pedido de prisión preventiva contra Pezo Amaringo.