TEGUCIGALPA, HONDURAS.
La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cossette López Osorio, solicitó formalmente a las Fuerzas Armadas de Honduras el despliegue de elementos militares en las principales sedes del ente electoral, ante el anuncio de manifestaciones del partido oficialista Libertad y Refundación (Libre) para los días 26, 27 y 28 de junio.
La petición fue enviada mediante una carta oficial dirigida al jefe del Estado Mayor Conjunto, general Roosevelt Hernández, en la que López justifica la medida como una acción preventiva “para garantizar la integridad de los colaboradores y de las instalaciones”, frente a posibles alteraciones del orden público.
Según el documento, el Instituto Nacional de Formación Profesional (Infop) y la sede del CNE en El Prado, ambas en Tegucigalpa, serían custodiadas por elementos militares durante las fechas indicadas.
El CNE también designó al ingeniero Ferid Gabrie, jefe de Seguridad Interna, como enlace directo con las Fuerzas Armadas para coordinar los operativos.
“Dicha solicitud obedece a la prevención de cualquier alteración al orden, considerando que en las fechas mencionadas se han anunciado manifestaciones por parte de un partido político”, se lee en la carta, en referencia a Libre.
La carta no se publicó oficialmente, pero ya circula en redes
Pese a que el documento no ha sido divulgado en las cuentas oficiales del CNE, militantes del Partido Nacional, como la diputada Merary Díaz, difundieron una copia a través de redes sociales.
En su publicación, Díaz pidió al general Hernández que atienda con prontitud la solicitud del CNE, asegurando que se debe evitar que “militantes oficialistas causen disturbios en el órgano electoral”.
Contexto: tensión rumbo a las elecciones de 2025
Esta solicitud de resguardo militar llega en un clima político cada vez más tenso, en el que sectores de oposición han denunciado supuestos intentos del partido Libre de presionar o tomar control sobre decisiones administrativas y logísticas del Consejo Electoral.
La acción también revive preocupaciones sobre la independencia del CNE y la necesidad de resguardar su operatividad de cara al proceso electoral de 2025, en el que se renovarán autoridades nacionales y locales.
Hasta el momento, ni el Partido Libre ni las Fuerzas Armadas han emitido un comunicado oficial en respuesta a esta solicitud, que podría marcar un nuevo punto de fricción entre las instituciones del Estado y el oficialismo.
