TEGUCIGALPA, HONDURAS.
La empresa Próspera en Roatán advirtió este jueves sobre las posibles consecuencias que podría tener una eventual decisión de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de declarar inconstitucional la Ley de Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDEs), con efectos retroactivos.
Según la compañía, esta medida afectaría gravemente tanto la estabilidad democrática como la economía de Honduras, poniendo en peligro miles de empleos y millones en inversión extranjera.
Próspera subrayó en su comunicado que, según la mayoría de los expertos legales hondureños, aplicar un fallo judicial retroactivo que elimine empleos e inversiones “va en contra del derecho hondureño bien establecido”, generando un ambiente de inseguridad para los inversionistas y trabajadores en el país.
La empresa también alertó que una decisión de este tipo podría abrir la puerta a una persecución política hacia los partidos de oposición, cuyo único “delito” sería haber apoyado una legislación que ha contribuido a generar más de 8,000 empleos de calidad y ha atraído más de 300 millones de dólares en inversión a Honduras.
“No hay nada que ganar con un fallo así”, advirtió Próspera, señalando que invalidar de manera retroactiva las inversiones en las ZEDEs tendría como consecuencia reclamos de expropiación y debilitaría las defensas legales que Honduras ha presentado en arbitrajes internacionales.
La empresa destacó que “un fallo que se aparte de décadas de precedentes ininterrumpidos en Honduras no tendría ninguna legitimidad”, recordando que más de un centenar de inversionistas estadounidenses tienen capital comprometido en estos proyectos, y que cualquier medida adversa afectaría directamente sus intereses.
El comunicado advierte, además, que ciudadanos de más de 20 países hacen negocios actualmente en Próspera y otras ZEDEs, y que una decisión contraria dañaría de forma considerable las relaciones internacionales, en particular con Estados Unidos, lo cual podría derivar en sanciones, cancelaciones de visas y restricciones en las remesas y la ayuda internacional.
Según Próspera, “decenas de congresistas de ambos partidos en Estados Unidos ya han expresado su preocupación por la posible expropiación de inversiones en las ZEDEs”, lo que añade presión internacional sobre el asunto, considerando el impacto económico que un fallo desfavorable podría tener para el país.
La empresa advirtió que la estabilidad del sistema financiero de Honduras también estaría comprometida, dado que varios bancos locales tienen préstamos ligados a proyectos dentro de las ZEDEs, por lo que cualquier cambio abrupto afectaría la solidez financiera de estas instituciones.
Próspera señaló que, si el fallo retroactivo se materializa, el perfil de riesgo del país podría aumentar significativamente, encareciendo el acceso a financiamiento y frenando el crecimiento económico a largo plazo, afectando aún más el desarrollo económico nacional.
Finalmente, la empresa hizo un llamado a las autoridades hondureñas para que se busquen soluciones que preserven la estabilidad económica y social del país, evitando las repercusiones negativas que una decisión judicial de esta magnitud podría tener para el futuro de Honduras.