TEGUCIGALPA, HONDURAS.
El Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) alertó sobre el impacto económico que están generando las protestas que obstaculizan el paso vehicular en la carretera que conecta los municipios de Choloma y Puerto Cortés, una de las arterias logísticas más importantes del país.
El gerente de política económica del Cohep, Santiago Herrera, estimó que las pérdidas económicas por cada día de bloqueo en esa zona alcanzan los 33.8 millones de dólares, equivalentes a unos 890 millones de lempiras.
“Esta vía es el principal acceso al puerto más importante de Honduras. A diario circulan por ahí unos 846 camiones de carga con contenedores que transportan diversos productos”, explicó Herrera.
Zona estratégica para la economía nacional
Según el directivo del Cohep, la región norte, específicamente el corredor entre Choloma, Puerto Cortés y San Pedro Sula, concentra cerca del 40 % del Producto Interno Bruto (PIB) en servicios y 30 % en la industria. Cualquier interrupción en la actividad comercial de esta zona impacta directamente en la economía nacional.
Además del comercio, la protesta también afecta la movilidad de al menos 300 trabajadores diarios que utilizan esa carretera para desplazarse a sus empleos, añadió Herrera.
Incertidumbre política frena la inversión
Herrera también señaló que la situación se agrava por el clima de incertidumbre política que vive el país, en el marco del proceso electoral y los recientes conflictos institucionales. Hizo referencia a la controversia en torno al caso del exfiscal general interino, Johel Zelaya (Koriún), como ejemplo del tipo de inestabilidad que ahuyenta la inversión.
“¿Quién se siente confiado en desarrollar sus actividades en un país con tanto conflicto en marcha?”, cuestionó el economista. “Cuando no hay inversión, no hay empleo; sin empleo, no hay ingresos para las familias, y sin ingresos no hay bienestar común”, concluyó.