El expresidente asegura que las pruebas del Ministerio Público confirman un plan para derrocar a la presidenta Xiomara Castro, mientras crecen las dudas sobre la solidez de la acusación.
TEGUCIGALPA, HONDURAS.
El expresidente Manuel Zelaya Rosales reaccionó con un mensaje cargado de advertencias y referencias históricas al anuncio del fiscal general, Johel Zelaya, sobre una presunta conspiración para asesinarlo, impedir las elecciones y desestabilizar el gobierno de su esposa, la presidenta Xiomara Castro.
Desde su cuenta en X, Zelaya afirmó que los audios presentados por el Ministerio Público revelan una “conspiración criminal para derrocar al gobierno” y las “perversas intenciones de sectores oscuros que buscan sabotear el proceso electoral y consumar el magnicidio planificado desde el golpe de 2009”.
Enfatizó que “ahora tampoco podrán lograrlo, porque nos cubre el pueblo y la sangre de Cristo”. En otro mensaje, fue más tajante: “Se confirma que sí existió un plan para cegarme la vida en el 2009”.
El fiscal general reveló este jueves que las investigaciones condujeron a la captura de Arcadio López Estrada, Perfecto Jesús Enamorado y Antonio Katán Rivera, acusados de terrorismo y tentativa de asesinato contra el coordinador del Partido Libre.
Según la versión oficial, el supuesto plan incluía no solo atentar contra el exmandatario, sino también provocar la salida forzada de la presidenta.
En conferencia de prensa, Johel Zelaya aseguró que presentó grabaciones de audio como evidencia de la conspiración, y subrayó que el país “necesita luchar contra el narcotráfico, el crimen organizado y la corrupción”.
La denuncia, sin embargo, ha generado reacciones encontradas. Mientras el oficialismo la presenta como la confirmación de amenazas históricas, líderes opositores y analistas cuestionan la solidez de las pruebas, advirtiendo que podría tratarse de un recurso político para victimizar al oficialismo y movilizar su base en vísperas de las elecciones generales.