• López asegura que fue presionada para adjudicar la conectividad satelital a Smartmatic, pese a ser la oferta más cara; el conflicto destapa una nueva fractura interna a semanas de las elecciones
TEGUCIGALPA, HONDURAS.
La crisis en el Consejo Nacional Electoral (CNE) escaló este jueves a un nuevo nivel de tensión, luego de que la consejera Cossette López denunciara públicamente haber sido amenazada por el consejero Marlon Ochoa durante una sesión del pleno.
El incidente ocurrió en el marco del proceso de adjudicación del contrato de conectividad satelital del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), uno de los pilares técnicos del proceso electoral de noviembre.
A través de un mensaje en su cuenta de X, López informó que decidió abandonar la sesión tras recibir presiones directas para favorecer a la empresa Smartmatic, cuya propuesta —según señaló— es la más costosa entre las oferentes.
“Acabo de abandonar la sesión del pleno tras recibir amenazas del consejero Marlon Ochoa, quien pretende denunciarnos ante el Ministerio Público si no adjudicamos a Smartmatic la conectividad satelital para el TREP, pese a ser la oferta más alta (67 millones de diferencia) y existir otras empresas que cumplen todos los requisitos a mejor precio”, publicó la consejera.
López añadió que desde hace 20 días se han obstaculizado los procesos administrativos necesarios para formalizar la adjudicación y sugirió que esas demoras podrían haber estado relacionadas con intereses particulares en torno al contrato.
“Conectividad sí, con actos de corrupción NO. No voy a violar la ley ni el derecho ajeno”, concluyó.
Las declaraciones de López destapan una grave ruptura dentro del CNE, justo cuando la institución debería proyectar cohesión y confianza ante la ciudadanía.
Su denuncia no solo apunta a un conflicto personal, sino que insinúa posibles irregularidades y presiones indebidas en un proceso de contratación clave para garantizar la transparencia electoral.
La empresa Smartmatic, mencionada en múltiples controversias electorales en distintos países de la región, fue propuesta para proveer la conectividad satelital del sistema TREP, el mecanismo encargado de transmitir los resultados preliminares desde los centros de votación hacia el centro de cómputo nacional.
Hasta el momento, ni el consejero Marlon Ochoa ni la presidencia del CNE han emitido declaraciones oficiales sobre la denuncia, lo que incrementa la incertidumbre institucional a pocas semanas de que el órgano electoral asuma el control total del proceso general del 30 de noviembre.
Analistas advierten que el conflicto interno dentro del CNE erosiona aún más la confianza ciudadana en las instituciones encargadas de organizar las elecciones, en un país donde los comicios anteriores ya estuvieron marcados por acusaciones de manipulación, descoordinación y opacidad en la transmisión de resultados.
Con esta denuncia, el CNE entra en un punto crítico de credibilidad, mientras el país se prepara para un proceso electoral decisivo que exige transparencia, independencia y rendición de cuentas, valores que hoy parecen estar nuevamente en entredicho.








