TEGUCIGALPA, HONDURAS.
Tras la confirmación el pasado lunes de la muerte del tercer aspirante a oficial en la Academia Nacional de Policía (ANAPO), las reacciones de distintos sectores del país no se han hecho esperar, y el Congreso Nacional no es la excepción.
Es por ello que la diputada del Partido Salvador de Honduras (PSH), la doctora Suyapa Figueroa, presentó una moción para que el ministro de la Secretaría de Seguridad, Ramón Sabillón, explique todo lo sucedido.
“La verdad es que no se trata de una interpelación en sí, sino de una explicación o presentación de los resultados de la autopsia y de las investigaciones exhaustivas sobre la causa de muerte de estas tres personas”, expresó.
La profesional de la medicina manifestó que los afectados en las pruebas de ingreso en la ANAPO, el pasado 11 de septiembre, debieron tener todas las garantías de procedimiento antes de ser sometidos a la evaluación.
El informe debería ser presentado ante tres comisiones legislativas relacionadas a derechos humanos, seguridad y salud a fin de analizar los resultados de las indagaciones sobre el tema, pormenorizó.
“Lo importante es tener una respuesta ante la población hondureña porque todo mundo se pregunta qué sucedió y lo hasta ahora expuesto por las autoridades no es satisfactorio”, apuntó.
La congresista considera propicio aprovechar la situación para aclarar lo acontecido y poner en mejores prácticas ese tipo de acciones por parte de la Policía hondureña.
Figueroa es de la opinión, además, que debe existir una investigación exhaustiva porque no sería la primera ocasión de un hecho polémico como el mencionado.
“Por tanto, si nosotros queremos tener una policía que verdaderamente sea creíble ante la sociedad hondureña y queremos evitar situaciones similares a esta, entonces deben revisarse los procedimientos”, concluyó.
La tercera fue Kevin Mejía, uno de los casi 500 aspirante a oficial quien falleció el lunes 19 de septiembre en un hospital privado de la capital, informaron fuentes cercanas a su familia, sin que oficialmente se conozcan las causas.
Extraoficialmente, según las primeras versiones difundidas por medios locales de prensa, es que más de 30 aspirantes resultaron afectados como supuesta consecuencia de las arduas pruebas físicas y aunado a ello, una intoxicación con gas lacrimógeno.
Lo anterior, como parte de una especie de bienvenida, que aparentemente se les hace a los nuevos ingresados, lo que fue descartado por la Secretaría de Seguridad.