El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo este domingo que está «abierto» a negociar su drástica política arancelaria solo si sirve para resolver el déficit comercial que tiene su país con las otras naciones.
«Quiero resolver el problema del déficit que tenemos con China, con la Unión Europea y otras naciones. Si quieren hablar de eso, estoy abierto a hablar.
Pero de lo contrario, ¿por qué yo quisiera hablar con ellos?», declaró a la prensa a bordo del avión presidencial Air Force One.
«Hablé con muchos europeos, asiáticos, de todo el mundo. Se mueren por llegar a un acuerdo», declaró. Asimismo, el mandatario negó que las fuertes caídas de la bolsa derivadas del plan arancelario fuera un objetivo deliberado de la Administración.
«No puedo decirles qué pasará con los mercados», declaró Trump. «No quiero que nada baje. Pero a veces hay que tomar medicamentos para solucionar algo», agregó.
Más de 50 países han hablado con EE.UU.
Más de 50 países afectados por la política arancelaria del presidente de EE.UU., Donald Trump, han hablado con el mandatario con el fin de negociar los aranceles, afirmó este domingo el director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, Kevin Hassett.
«Anoche recibí un informe del Representante de Comercio según el cual más de 50 países se han puesto en contacto con el presidente para iniciar una negociación», expresó Hassett en una entrevista en el programa ‘This Week’, de la cadena ABC News.
El arancel global del 10 % que Trump anunció esta semana entró en vigor ayer sábado a las 00.01 hora local del este de EE.UU. (04.01 GMT), en una medida que amenaza con provocar aún más turbulencias en las bolsas internacionales.
El 2 de abril, en una jornada bautizada como «el día de la liberación», el republicano anunció ese gravamen del 10 % a 184 países y territorios, además de la Unión Europea (UE), y que, en algunos casos, incrementó hasta el 20 % para productos europeos o el 34 % para importaciones chinas.
El efecto de los aranceles de EE.UU.
Los aranceles han sembrado el temor entre los inversores a una posible desaceleración económica, y de hecho, entidades financieras como JP Morgan han advertido de que podrían empujar a EEUU a una recesión y a una subida de los precios para los consumidores.
Además, el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, afirmó el viernes que los aranceles se traducirán en una mayor inflación y un menor crecimiento económico.
Hassett, que fue uno de los miembros de la Administración Trump que se reunieron con él mientras deliberaba sobre los aranceles, reconoció que «podría haber algún aumento» de los precios pero negó que los gravámenes vayan a suponer «una carga pesada» sobre el consumidor estadounidense.
El director del Consejo Económico Nacional subrayó además que los aranceles no son un impuesto «porque dependen de la oferta y la demanda»: «Nuestro enfoque es reducir los impuestos, el gasto y la regulación e imponer una línea de base arancelaria en todo el mundo, golpeando a los actores más duros», agregó.
Al ser preguntado sobre por qué Rusia no figura en la lista de países afectados por los aranceles, Hassett dijo que, a diferencia de otros aliados de EE.UU. como Europa, Canadá o México, «Rusia está en medio de negociaciones de paz (con Ucrania) que afectan a miles de personas», por lo que imponer gravámenes «no es apropiado».
Los aranceles de EE.UU. no se aplazarían
Por su parte, el secretario de Comercio de EE.UU., Howard Lutnick, dijo este domingo que los aranceles anunciados por el presidente Trump, no se aplazarán sino que seguirán en vigor «durante días y semanas» pese a posibles negociaciones con los países golpeados por los gravámenes.
«El presidente tiene que reajustar el comercio mundial. Todo el mundo tiene un superávit comercial y nosotros tenemos un déficit comercial (…). Los países del mundo nos están estafando y eso tiene que terminar», expresó Lutnick en una entrevista con la cadena CBS News.
Esta afirmación tiene lugar momentos después de que el director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, Kevin Hassett, y el Secretario del Tesoro, Scott Bessent, revelaran el intento de negociar los aranceles por parte de 50 países afectados por esta política arancelaria.
Según Lutnick, esto solo demuestra que «todos estos países saben que nos han estado estafando».
El Secretario aseguró que Estados Unidos depende de las medicinas y semiconductores que se fabrican en el extranjero e incidió en que el país tiene que empezar a defenderse y dejar de ser «estafado por todos los países del mundo».
La inclusión de lugares inhabitados en la lista de aranceles
El arancel global del 10 % que Trump anunció esta semana entró en vigor este sábado a las 00:01 hora local del este de EE.UU. (04:01 GMT), en una medida que amenaza con provocar aún más turbulencias en las bolsas internacionales.
En su lista de gravámenes también se incluían territorios como la isla de Heard y McDonald, un archipiélago autónomo de Australia inhabitado por humanos y sin actividad económica que es el hábitat de focas y pingüinos, o las islas Cocos, otro archipiélago australiano con unos 600 habitantes.
Lutnick justificó la inclusión de estos lugares diciendo que «si dejas algo fuera de la lista, los países van a usar esos territorios para avanzar hacia nosotros» como según él hizo China tras los aranceles de 2018, por lo que la idea es poner fin «a estas ridículas lagunas».
Vietnam pide a Trump aplazar 45 días los aranceles
El secretario general del Partido Comunista de Vietnam, To Lam, pidió al presidente Donald Trump que retrase durante al menos 45 días el arancel del 46 % que está previsto entre en vigor el próximo 9 de abril, según reportan este domingo medios locales.
De acuerdo con el periódico The New York Times, Lam pidió a Trump en una carta enviada ayer sábado que nombre a un representante del país para dirigir las negociaciones con el viceprimer ministro de Vietnam, Ho Duc Phoc, con el fin de llegar a un acuerdo «lo antes posible».
Además, solicitó al mandatario reunirse con él en Washington a finales de mayo para «llegar conjuntamente a un acuerdo sobre este importante asunto, en beneficio de ambos pueblos y para contribuir a la paz, la estabilidad y el desarrollo en la región y en el mundo».
La misiva tiene lugar después de que el viernes el presidente de EE.UU. sostuviera una conversación telefónica con To Lam de cara a negociar el cuantioso volumen de aranceles anunciados por el mandatario sobre el país asiático.
«Acabo de tener una llamada muy productiva con To Lam, que me dijo que Vietnam quiere reducir sus aranceles a CERO (para las importaciones estadounidenses) si logra llegar a un acuerdo con los Estados Unidos (…). Le dije que esperaba una reunión en el futuro cercano», escribió entonces el republicano en su red Truth Social.
Con información de EFE