Como resultado, entre los agricultores franceses, que protestan contra las políticas agrarias del Gobierno, y las fuerzas de seguridad se produjeron violentos enfrentamientos.
FRANCIA.
(RT)- Decenas de manifestantes descontentos con las políticas agrarias del Gobierno francés rompieron una reja e irrumpieron en una exposición agraria en París, pocos minutos después de que el presidente Emmanuel Macron llegara al lugar.
Este sábado, arrancó la exposición del Salón Internacional de la Agricultura, adonde Macron acudió para reunirse con los sindicatos agrícolas. Los manifestantes lo recibieron gritando diversos lemas, denunciando la falta de acción por parte de las autoridades para ayudar a los agricultores y pidiendo la dimisión del jefe de Estado.
Después de que los agricultores forzaran la entrada, empezaron violentos enfrentamientos entre los manifestantes y los servicios de seguridad. Según BFMTV, varias personas fueron detenidas. Posteriormente, se desplegaron agentes antidisturbios (CRS, por sus siglas en francés) para controlar la situación.
Tras su reunión con los sindicatos, Macron declaró a la prensa que las autoridades «no pueden responder a la crisis agrícola en cuestión de horas» y pidió «un enfoque modesto y cuerdo» de la situación.
Por su parte, Patrick Legras, agricultor y miembro del sindicato Coordinación Rural, lamentó la inacción del Gobierno ante las exigencias de los agricultores. «Pedimos medidas que puedan aplicarse rápidamente y, en lugar de ello, el presidente de la República convocó al CRS. Como pueden ver, estamos sufriendo todos. Esto es dramático para la comunidad agrícola y para la imagen de Francia en toda Europa», dijo al canal.
Conversación con agricultores
Más tarde, el mandatario mantuvo un diálogo con representantes de los sindicatos agrícolas, en el que reiteró su llamamiento a la calma para garantizar el buen desarrollo del evento. Escuchó sus denuncias y prometió dar respuestas después.
Una de los miembros de Coordinación Rural denunció que, aunque las protestas duran ya algún tiempo, no se ha logrado «avanzar ni un ápice».
A su vez, Macron afirmó que «no es cierto que no se haya hecho nada», refiriéndose a las 62 medidas en favor de la agricultura francesa anunciadas por el Gobierno recientemente. Entre las medidas hay el proyecto de ley que «reconoce en blanco y negro el objetivo de soberanía alimentaria», al situar «la agricultura entre los intereses fundamentales de la nación». «No podemos pretender empezar de cero cada vez. No es cierto que no se haya hecho nada», insistió el presidente.
Además, rechazó las acusaciones de que la situación agraria en el país cayera en decadencia. «Francia sigue siendo una agricultura fuerte, que produce para nuestras necesidades e incluso exporta. No es cierto decir que se está desmoronando», expresó.