TEGUCIGALPA, HONDURAS.
A criterio del analista Luis León, la terminación del Tratado de Extradición entre Honduras y los Estados Unidos pondrá al país “en una situación de vulnerabilidad”, frente al narcotráfico.
León explicó que, con la finalización del acuerdo en poco más de dos semanas (28 de febrero), ya no habrá un marco legal para ejecutar solicitudes de extradición, lo que obstaculizará la entrega de criminales a los países donde cometieron delitos.
“Es preocupante, no podemos decir que es alentador teniendo en cuenta que fue una pésima decisión por parte del Ejecutivo renunciar a este tratado”, declaró.
El experto recordó que, ante la fragilidad institucional de Honduras, el tratado era una de las pocas herramientas efectivas para combatir el narcotráfico, un problema que afecta a toda la región.
“Solamente viene a poner a Honduras en una situación de vulnerabilidad, partiendo del hecho de que cualquier narcotraficante va a hacer y deshacer, sino va a haber ningún riesgo”, acentuó.
La presidenta Xiomara de Zelaya ordenó el pasado 28 de agosto a su canciller, Eduardo Enrique Reina, denunciar el tratado de extradición con Estados Unidos.
Entre 2014 y 2024, Honduras extraditó a más de 50 ciudadanos, en su mayoría solicitados por Estados Unidos por delitos relacionados con el narcotráfico, según cifras oficiales.
La decisión de la mandataria se produjo después de que la embajadora estadounidense en Tegucigalpa, Laura Dogu, expresara su preocupación por la reunión de autoridades de Defensa de Honduras con el sancionado ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López. Además, el anuncio coincidió con la difusión de un video en el que se ve a su cuñado, Carlos Zelaya, reunido con conocidos narcotraficantes.