TEGUCIGALPA, HONDURAS.
Centroamérica registró en los últimos años «un retroceso» de la democracia y un aumento de «prácticas autoritarias» que han impulsado la migración irregular de sus poblaciones, alertaron este miércoles expertos y diplomáticos en un foro celebrado en Honduras.
En la inauguración en Tegucigalpa del XII Foro Centroamericano de Donantes, la directora de la Fundación Internacional de Seattle (SIF, por sus siglas en inglés), Adriana Beltrán, dijo a EFE que en los últimos años «todos hemos sido testigos del retroceso en temas de fortalecimiento de la democracia y el incremento de prácticas autoritarias».
Esas prácticas han contribuido al «cierre del espacio cívico, la criminalización de quienes defienden los derechos humanos, la restricción a la libertad de prensa y la expresión», señaló.
El debilitamiento del Estado de derecho está relacionado a «esa pérdida de esperanza que puede tener una persona al pensar que no va a tener un futuro mejor y del impacto que ha tenido la corrupción en la educación, salud, (y) la Justicia de su país», agregó.
Para Beltrán, este escenario propicia que muchas personas se vean «obligadas a huir de sus comunidades o sus casas en búsqueda de un futuro mejor».
Otro flagelo que preocupa a la directora ejecutiva de SIF es la corrupción, una «problemática sistémica» de toda la región e instó a los diferentes sectores a promover una «agenda común y alianzas» para atacar las causas de este flagelo.
Habló además del «papel fundamental» de los países centroamericanos y Estados Unidos en el combate a la migración irregular desde Centroamérica.
«Lamentablemente la reforma migratoria no ha avanzado», enfatizó Beltrán, quien dijo que la migración irregular requiere «políticas sostenibles, integrales y de largo plazo» que permitan abordar las diferentes áreas de la migración forzada.
Estas políticas también deben asegurar la atención de «personas que están buscando y tienen el derecho de buscar protección por las condiciones de sus países y hacerlo de una manera segura», subrayó.
«PÉRDIDA DE CONFIANZA EN LA DEMOCRACIA»
Centroamérica enfrenta «muchos retos», como el cierre de espacios cívicos, amenazas a la libertad de expresión y la pérdida de confianza en la democracia y las instituciones democráticas, dijo en su discurso la embajadora de Estados Unidos en Honduras, Laura Dogu.
«Vemos líderes vendiendo la idea de que para resolver problemas deben tener más poder, en lugar de fortalecer las instituciones y eliminar la corrupción», señaló la diplomática.
Agregó que hay «Gobiernos atacando los medios de comunicación y la sociedad civil cuando critican sus políticas y acciones y Centroamérica no es una excepción».
Los países centroamericanos han «atravesado muchos desafíos, pero la esperanza del pueblo no desiste, esa resiliencia nos lleva a apoyar temas importantes como la equidad, la justicia y el Estado de derecho», subrayó Dogu.
«Nuestro abordaje en Centroamérica es integral a través de nuestra estrategia para abordar las causas fundamentales de la migración irregular, creamos oportunidades para que los centroamericanos no pongan en peligro sus vidas en un viaje hacia Estados Unidos», destacó.
La embajadora estadounidense afirmó que la región tiene «enormes retos», pero también «hay un campo extenso para las oportunidades», y resaltó que cuando la sociedad civil y los donantes trabajan en conjunto con los Gobiernos se «alcanzan soluciones sostenibles y equitativas».
«Una democracia efectiva debe caminar de la mano con el desarrollo y los derechos humanos», indicó Dogu, y aseguró que los centroamericanos tienen «derecho a vivir en paz, sin miedo».
LA CORRUPCIÓN, “UNA AMENAZA” A LA SEGURIDAD
En la inauguración del encuentro, que se extenderá hasta este viernes, la subsecretaria de Estado adjunta de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de EE.UU., Emily Mendrala, dijo que la prosperidad, la seguridad y la democracia en el Norte de Centroamérica -que integran El Salvador, Guatemala y Honduras-, son prioritarios para su país.
Señaló que para el Gobierno de EE.UU: la lucha contra la corrupción y el fortalecimiento de las instituciones democráticas son relevantes, porque «creemos que sin un combate a la corrupción y sin una democracia fuerte, nuestros logros serían débiles».
“La corrupción mundial es una amenaza para nuestra seguridad nacional”, por lo que el presidente de EE.UU., Joe Biden, tiene como “prioridad” combatir ese flagelo, indicó Mendrala.
La alta funcionaria de EE.UU. aseguró que la corrupción, la falta de democracia e instituciones débiles impulsan la migración irregular y “tenemos que combatirlo de frente para tener un impacto en el flujo migratorio” hacia Estados Unidos.